El 2017 del Sevilla: un año de claroscuros sin tocar plata
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En los balances anuales del Sevilla FC en los últimos años, lo normal era recordar el título que había ganado. Así sucedió en los tres anteriores, pero 2017 se cierra sin plata que tocar y con las dudas sobre la continuidad del proyecto ganador del equipo nervionense.
En términos estrictamente de resultados, el equipo no acaba mal el año. Está quinto en la Liga y clasificado para los octavos de final de la Liga de Campeones y la Copa del Rey, pero las sensaciones al término de estos doce meses son muy malas.
En ElDesmarque resumimos el año del Sevilla, centrándonos en lo más destacado de cada uno de los meses.
Como siempre, el mes de enero estuvo marcado por el mercado de invierno, en el que el Sevilla hizo un esfuerzo importante para tratar de mantener su posición en los puestos altos de la Liga. Llegaron Lenglet, procedente del Nancy, Jovetic, cedido por el Inter, y Walter Montoya, fichado a Rosario Central. Por el contrario, se fueron Kolo, Sirigu y Kiyotake.
En términos competitivos se centró el primer mes del año por el triple enfrentamiento ante el Real Madrid. En la Copa quedó eliminado tras un arbitraje muy polémico en la ida en el Bernabéu, pero en Liga fue capaz de ganarle y todo indicaba a que sería capaz de pelear por la Liga. De hecho, firmó la mejor primera vuelta de su historia, acabándola como segundo clasificado.
Además, en estos partidos contra el equipo blanco se recrudeció el enfrentamiento entre el sevillismo y Sergio Ramos, que se encaró con la grada desatando las iras de los hinchas blanquirrojos.
En ese momento álgido de la temporada, Biris Norte decidió dejar de animar al no poder introducir su pancarta en el Sánchez-Pizjuán. El ambiente en el estadio se enrareció y, en cierto modo, el equipo comenzó a notarlo.
En el mes de febrero, el Sevilla mantuvo sus opciones en la Liga y, de hecho, ganó tres partidos y empató uno de los cuatro que jugó. Entre ellos, se impuso en el derbi en el Benito Villamarín en el último choque del mes (1-2), en la que sería su última victoria a domicilio de la temporada.
También se jugó la ida de los octavos de final de la Liga de Campeones. En el partido ante el Leicester jugado en el Sánchez-Pizjuán, los de Sampaoli fueron muy superiores, pero un gol de Vardy en una jugada aislada metió a los ingleses en la eliminatoria y quedó la sensación de que se le había escapado una gran oportunidad.
Todo lo bueno que consiguió el Sevilla de Sampaoli hasta ese momento se desmoronó en el mes en el que comenzaba la primavera. Comenzó marzo ganando al Athletic Club en Nervión en un mal partido que sería preludio de lo que sucedería después, pues no volvería a vencer.
La temporada quedó marcada el 14 de marzo, cuando visitó al Leicester en la vuelta de los octavos de final de la Liga de Campeones y se vio eliminado en un partido en el que el equipo no pudo competir ante las embestidas de un equipo rudimentario pero con más empuje. Esa sensación de impotencia supuso un punto de inflexión y jugadores como Nasri quedaron señalados.
Para colmo de males, el último día del mes se anunció la cacareada marcha de Monchi del club. El director deportivo llevaba meses amagando con su salida, que se produjo en un mal momento deportivo, confirmándose en una emotiva rueda de prensa.
El Sevilla siguió perdiendo fuelle en el inicio de abril. En el primer partido del mes, había perdido la tercera plaza en favor del Atlético de Madrid, y acabó con su mala racha de resultados ante el Deportivo de La Coruña el día 8, Sábado de Pasión. Para ese encuentro, precisamente, José Castro decidió que la pancarta de Biris Norte podía volver a entrar, afirmando que no se actuaba igual en todos los estadios. El grupo de animación del Gol Norte volvió a dar ambiente y color a la grada desde entonces.
En los prolegómenos del partido ante los coruñeses, Monchi se despidió de la afición sevillista en un emotivo acto. Nunca se había homenajeado así a un director deportivo que se marchaba, pero el de San Fernando no ha sido uno más en el cargo, por sus éxitos y por su duración. El 24 de abril se confirmó que fichaba por la Roma, pese a que meses antes había desmentido esas informaciones.
Dos días antes, el consejo de administración hizo oficial que Óscar Arias sería el director deportivo del Sevilla, sustituyendo al que había sido su jefe en los años anteriores.
A nivel competitivo, lo único que le quedaba al Sevilla en el mes de las flores era confirmar su clasificación para la próxima Liga de Campeones, algo que no es que llegara a peligrar pero sí que provocó cierto nerviosismo ante la deriva de un equipo que se hundió en los últimos meses.
Al final, llegó el 14 de mayo de una forma extraña, ya que en la penúltima jornada cayó en el Santiago Bernabéu, pero el Villarreal empató sin goles en el estadio de La Cerámica y ya no pudo alcanzarle. Era la cuarta clasificación vía Liga para la Champions, algo que no conseguía el club desde 2010. También luchó por el récord de puntos, pero finalmente se quedó a cuatro de los 76 que logró en la 2014/15.
Terminada la competición, no tardaría en confirmarse lo que era un secreto a voces. Los dirigentes de la AFA viajaron a Sevilla para firmar a Jorge Sampaoli como nuevo seleccionador de Argentina, y el club avanzó el principio de acuerdo para ello el 26 de mayo.
El Sevilla Atlético, por cierto, confirmó su permanencia en Segunda División el 12 de mayo, con una victoria ante el Getafe en el Sánchez-Pizjuán que cerró una gran temporada.
Tocaba resetearse. Se había marchado el director deportivo y un entrenador que había levantado pasiones en el Sánchez-Pizjuán. La primera gran decisión de Óscar Arias era encontrar su sustituto, y el elegido fue Eduardo Berizzo, que tardó en aceptar la oferta debido a las diferencias entre lo que se ofrecía y lo que ganaba Sampaoli. Luis García Tevenet, por cierto, se hizo cargo del filial tras la marcha de Diego Martínez a Osasuna.
Al final del mes regresó Éver Banega, convirtiéndose en el primer fichaje de la era de Óscar Arias como director deportivo del Sevilla FC.
En el mes de julio el equipo volvió a trabajar para la temporada 2017/18, con Berizzo ya al frente. Llegaron los fichajes de Guido Pizarro, Muriel, Corchia y Nolito, pero el mes estuvo marcado por la espantada de Vitolo.
El canario, que tenía un pie en el Atlético de Madrid, acordó de forma sorpresiva su renovación con el Sevilla, algo que anunció José Castro el 10 de julio. El futbolista llegó al Aeropuerto de San Pablo un día más tarde, pero en el Sánchez-Pizjuán se quedaron esperándole para firmar. Al final, voló a Madrid y fichó por el club colchonero, con el que jugará ya en 2018. El papel de la UD Las Palmas como equipo puente indignó al sevillismo.
Esto desencadenó una crisis en el consejo, llevándose a cabo la dimisión de José María del Nido Carrasco como vicepresidente. El ‘caso Vitolo’ aún es plena actualidad en el Sevilla.
El regreso de Jesús Navas a Nervión fue la gran noticia del mes de agosto en materia de fichajes. El palaciego, tras semanas de ardua negociación, firmó y llevó a 12.000 sevillistas al Sánchez-Pizjuán en su presentación. También se fichó a Kjaer, Carole y Geis.
También comenzó la competición, con la disputa de la fase de play off de la Liga de Campeones. El Sevilla fue emparejado con el Istanbul Basaksehir, ganó en Turquía y empató en Nervión, en un día en el que Emre estrelló una falta en el palo en el descuento. La Liga comenzó con empate ante el Espanyol y victoria sobre el Getafe.
El sorteo de la Champions fue benévolo con el Sevilla, quedando emparejado con el Spartak de Moscú, el Liverpool y el Maribor Branik.
Además, se estrenó la grada del campo principal de la Ciudad Deportiva José Ramón Cisneros Palacios, en el partido entre el Sevilla Atlético y el Real Valladolid.
Acabada la vorágine del mercado de fichajes, el Sevilla se fue metiendo en la competición con buenos resultados y sensaciones de juego un tanto extrañas. Llegó a ser segundo en las jornadas 5 y 6.
Además, debutó en Champions en Anfield cosechando un buen empate 2-2 ante el Liverpool. En la segunda fecha se colocó líder de su grupo. Sólo perdió en su visita al Atlético de Madrid, que supuso la primera derrota de la temporada.
El décimo mes del año supuso el primer gran bache del Sevilla de Berizzo. Después de un parón, cayó primero en Bilbao ante el Athletic, y en apenas cuatro días fue goleado por el Spartak en Moscú y por el Valencia en Mestalla.
Fue un duro golpe a la línea de flotación sevillista, una mala racha que confirmaba las dudas que había despertado el equipo.
En octubre comenzó la andadura en la Copa del Rey, venciendo por 0-3 al Cartagena en tierras murcianas. Cerró el mes ganando al Leganés, no sin dificultades, en Nervión.
El Sevilla, a nivel de resultados, despertó en noviembre, con cuatro victorias un empate y una sola derrota, en el Camp Nou.
El día clave del mes fue el miércoles 21. Aquel día, el Liverpool vapuleó al equipo nervionense en la primera mitad, con un 0-3 que hacía presagiar una nueva goleada. Sin embargo, el equipo reaccionó y consiguió igualar el partido en el descuento con un gol de Pizarro que hizo enloquecer a la grada del Sánchez-Pizjuán.
En el descanso de aquel partido, Steven Nzonzi mantuvo una discusión con Eduardo Berizzo y, desde entonces, no ha vuelto a jugar un solo partido con la camiseta del Sevilla.
Al acabar, corrió por los pasillos del Sánchez-Pizjuán que el entrenador sufría un cáncer de próstata, algo que anunció el club al día siguiente. Al final del mes, Berizzo se operó y su segundo, Ernesto Marcucci, se hizo cargo del equipo de forma interina.
También consiguió el pase a los octavos de final de la Copa tras eliminar al Cartagena.
Como octubre, el último mes del año alumbró otra mala racha de resultados, que ha acabado desesperando al sevillismo. Sólo le ha ganado al Deportivo de La Coruña en el primer partido. Tristes empates ante el Maribor y el Levante, una goleada vergonzosa en el Bernabéu, con un 5-0 en la primera parte, y otro partido pésimo ante la Real Sociedad han cerrado el año a nivel competitivo, con muchas dudas sobre Eduardo Berizzo. Eso sí, consiguió cerrar el año sin perder ni una sola vez en el Sánchez-Pizjuán, con un balance de 19 victorias y siete empates.
El resultado de Eslovenia, eso sí, le sirvió para cerrar el pase por segunda vez consecutiva –nunca antes lo había logrado- a los octavos de final de la Liga de Campeones, en los que ha sido emparejado con el Manchester United. En la Copa, pocos días antes, el sorteo determinó que se mida al Cádiz CF a principios de 2018.
Esas dudas se tradujeron en la destitución de Berizzo. El 22 de diciembre, el consejo de administración decidió prescindir del argentino, que poco antes había regresado al equipo tras recuperarse de su operación. De momento, el club no ha decidido quién será su sustituto.
En clave societaria, se celebró la Junta General Ordinaria de Accionistas, en la que el principal protagonista fue el expresidente José María del Nido Benavente, que reapareció en la asamblea tras tres años en prisión. José Castro pudo sacar adelante todas las votaciones, incluidas la del reparto de dividendos entre los accionistas y la asignación de un sueldo para algunos consejeros.