Quincy Promes y el carril zurdo

Quincy Promes fue el último fichaje del verano del Sevilla y el más caro de su historia y del mercado para la dirección deportiva de Joaquín Caparrós.

Los cierto es que por distintas circunstancias, el extremo holandés todavía no ha habido oportunidad de verlo en acción y cuando lo ha hecho ha sido con pocos minutos o en una posición un tanto extraña.

Promes salió en el epílogo del derbi ante el Betis cuando ya el partido iba 1-0 para el cuadro verdiblanco y con un futbolista más para el equipo de Quique Setién.

Con pocos espacios y con un Sevilla que no podía jugar a la contra, el extremo holandés prácticamente no tocó una pelota y no pudo desplegar su fútbol.

Este pasado domingo ante el Getafe, el es del Spartak tuvo más minutos pero tampoco pudo aportar al equipo lo que a él le hubiera gustado. Machín le dio entrada por y le ordenó que se ubicara en el carril zurdo con todo el campo por delante. Es cierto que Promes estaba fresco y tiene capacidad para llegar arriba. Sin embargo, el holandés es un jugador explosivo y ante el Getafe estuvo más pendiente de la defensa que del ataque.

Desde su entrada en el 69' por Aleix Vidal, el holandés sólo pudo llegar en una ocasión clara al área después de un buen regate de tacón. Más allá de esa acción, a Promes se le volvió a ver poco.

El próximo jueves a partir de las 18.55h contra el Standard de Lieja, el fichaje más caro de la historia del Sevilla tendrá una nueva oportunidad para demostrar su valía. El equipo necesita un jugador eléctrico y Promes cumple el perfil. Una buena actuación sería una gran noticia para Pablo Machín.