Unos tipos duros hacen tablas al ajedrez
Todos los partidos los compite el Sevilla como si fuera el último. Todos los partidos los juega al máximo, y se encontró este sábado con otro rival que se equipara en intensidad, concentración y agresividad. El conjunto de Lopetegui se mantiene en esa línea de competitividad, de rigor defensivo, de concentración e intensidad, y de poca resolución, y a partir de ahí el empate ante el Atlético lo puede dar por bueno, teniendo en cuenta que Vaclik paró un penalti, que Koundé salvó a su equipo en el descuento en una acción espectacular y que sufrió por momentos. Aunque con algo más de artillería arriba lo podría haber mejorado también el Sevilla (acuérdense de ese remate de De Jong solo de cabeza). Por eso, por más o por menos, el punto es válido.
Por eso y porque realmente hubo equilibrio. En el campo y en los banquillos. Si en el campo la intensidad predominaba, en las bandas se disputó otra bonita batalla. Dio primero Lopetegui sorprendiendo con tres centrales saliendo con la pelota, luego llegó la réplica de Simeone sorprendiendo en el inicio de la segunda mitad con cambios en el equipo y en el juego, y luego de nuevo Lopetegui variando el sistema para volver a equilibrar el partido. Fue una bonita batalla estratégica entre generales en un tablero con guerreros. Que acabó en tablas.
Pelea, intensidad... lo esperado
No hacían falta ni adivinos ni grandes analistas para confirmar la sospecha de cómo iba a ser el partido. Las características de los dos equipos dejaban poco lugar a dudas. Agresividad, intensidad, concentración, seguridad, pocos alardes y pelea por cada metro de campo. Así es el Atlético de Madrid desde hace años, pero es que así es también este Sevilla pétreo, duro, aguerrido.
Pero dentro de esa generalidad y previsión de partido hubo bastantes matices. Como el que introdujo Julen, que optó en fase de creación por una defensa de tres, con Gudelj metido entre Koundé y Diego Carlos. La idea era contar con mayor facilidad para sacar la pelota, pero la realidad fue que la presión y la colocación del Atlético era tan firme que por ahí poca ventaja logró el Sevilla. Eso sí, la posesión y la iniciativa sí la tuvo gracias a contar con tantos jugadores cerca de la pelota, sin correr riesgos en la distribución. Por ahí se neutralizaba el Atlético, que jugaba siempre en su campo.
Ese cambio de Lopetegui conllevó cambios en el resto de líneas. El Mudo, que también entró titular, se alineó con Banega y Óliver en la medular y arriba quedaron De Jong y Ocampos, como segundo delantero. El argentino se movía con más libertad en ambos costados, por el centro... pero dejó a Jesús Navas 'solo' en la derecha, habitual punto de penetración de este Sevilla.
La pizarra de Julen
Pese a todo, el palaciego se bastó, en una acción con una mínima ventaja, para provocar una falta de Lodi en carrera que a la postre significó el gol del Mudo Vázquez, aunque los méritos también habría que repartirlos entre Lopetegui, porque la pizarra de arrastre y aparición del argentino funcionó de cine, y hasta con Oblak, que se tragó el remate de Vázquez algo tapado entre tanto jugador.
Hasta entonces el Atlético se había defendido bien pero ni siquiera había atrapado ni una sola contra que inquietara a un Sevilla muy bien puesto. Y después del tanto tampoco cambió demasiado. Ni siquiera el Sevilla, que siguió asegurando mucho la pelota, arriesgando poco. Eso sí, ya con ventaja en el marcador.
Sorprende Simeone, salva Vaclik
El partido en la segunda parte cambió, se agitó. Más bien lo agitó Simeone en el descanso. Con dos cambios (Diego Costa y Arias) y con un giro en la actitud de su equipo, que se marcó 15 minutos soberbios para someter al Sevilla, algo que pocos han conseguido esta temporada. Sufrió bastante el conjunto de Lopetegui en ese inicio de la segunda mitad. Entraba el Atlético por las bandas con mucha más gente y con más cabeza y velocidad y dinamismo. Tanto es así que fruto de esa mejora llegó el tanto del empate, en una empanada de Reguilón por cierto, otro gol anulado de Diego Costa por fuera de juego de Correa y hasta un penalti, dudoso a más no poder, que detuvo Vaclik al mismo Costa.
Entonces, si antes había intervenido Simeone, quiso intervenir Lopetegui. Corrigió posiciones y volvió a una defensa de cuatro, con Koundé de lateral y Navas algo más adelantado. Eso provocó un nuevo cambio en el partido, una nueva tendencia, en la que el Sevilla de nuevo se fue arriba y creó algo de peligro, sobre todo en un remate en córner de De Jong, que solo la mandó fuera de cabeza.
Koundé hace lo imposible
Llegó más en esos minutos, hasta los 10 finales, el conjunto de Lopetegui. Por la derecha, por la izquierda, aparecieron Navas, Ocampos... pero sin demasiado desequilibrio, todo sea dicho. Ni con tanta seguridad ni superioridad en las acciones definitivas.
Pero reservaba el partido aún más. Los últimos instantes volvieron a ser colchoneros. El Atlético apretó y dispuso de varias ocasiones claras, sobre todo una última en la que primero Gudelj y luego Koundé, de manera milagrosa y con alguna retención no rearbitrable, salvó al Sevilla de la derrota. El francés no lo pudo hacer mejor desde luego, pues el resultado final fue la salvación de ese gol que permitió al Sevilla sumar un punto que, visto lo visto, ni es del todo bueno ni es del todo malo. Lo que sí sigue siendo cierto es que el equipo de Lopetegui continúa siendo muy competitivo, un equipo incómodo, aunque poco resolutivo arriba, y así en encuentros importantes es complicado marcar las diferencias.
Todos los resultados en https://resultados.eldesmarque.com
Pues como hagan el tercer anillo no se yo en qué vais a superarnos. No vamos mas porque no cabemos, asi de sencillo, y si vosotros teneis 60.000 asientos y fuisteis 43.000 contra el celta, ¿qué haceis con los 17.000 que faltan? ¿los poneis de cartón?
Jajajajajajajajajajaja ya salen de la cueva, además poniendo lo mismo ke el tal fekir ese, curioso caso de coincidir, no? Juasjuasjuasjuasjuasjuas simples son simples, ke nos da lo mismos las 80.000 creaturitas ke metáis en vuestro tanatorio de hormigón, ke el tener más no os hace ser más grandes ke nosotros, de hecho teniendo más se habéis ido también a segunda división, ke un club se mira por su palmares, la finales disputadas, los años en primera, la clasificación histórica y datos reales ke importan en el mundo del fútbol el tener más o menos socios o aficionados ke otros no vale absolutamente para nada,el Zaragoza tiene menos socios ke ustedes y esta por encima en la clasificación histórica y en palmares sobre ustedes, a ver si se enteráis ya a más seáis más llorais después cuando se vayáis al bujero jajajajajajajajajajaja ah y hablas de suerte la misma ke tuvo tu ekipo contra el Madrid, un penal no pitado. Le anularon un gol, el mejor fue el Joel ese jajajajajajajajajajaja la suerte no te da títulos lo da el esfuerzo, la competitividad, la exigencia, algo de lo ke ustedes por naturaleza careceis, lo pillas ya, anda y date otra vez una vuelta por la cueva a ver si esta todo bien y en su sitio, ke lo mismo vuelves en nada, yo se ke estar más de 3 semanas allí dentro tiene ke ser un agobio y estar más pálido ke la cara de un Noruego, jajajajajajajajajajaja pero es lo ke hacéis, asomas la chola solo cuando algo os ha ido bien o al Sevillafc no le ha ido bien, pero después si no os escondes como cucarachas cuando sale el sol, sois así de cobardes y por eso sois unos segundones, por ke ko dais la cara nunca , en fin ya iremos hablando, de momento el jueves a la camita pronto ke los mayores juegan en Europa, saludos creaturita fekir a no ke es pepe a no rafa.
Es el equipo con más suerte de la Liga, se mereció el Atlético los 3 puntos de largo por ocasiones y el Penalty y otro que el árbitro se tragó al final y encima 39.000 Espectadores un sábado por la noche contra un Atlético y nosotros un día entre semana 45.000 , que vayan empezando el tercer ANILLO jaja pero de Churros.