Enfado y cabreo justificado: gran pitada del Sánchez-Pizjuán al Sevilla

El Sevilla tiene un problema enquistado cada vez que juega de local. Hace dos años era prácticamente imposible ganar en el Estadio Ramón Sánchez-Pizjuán, y ahora parece que es todo lo contrario. En los últimos tres encuentros en casa, el Sevilla de Julen Lopetegui ha empatado en tres ocasiones consecutivas: Alavés, Espanyol y Cluj.

Lo pero de todo es que las sensaciones que envuelven el juego del Sevilla son muy malas. Ante el Cluj, los de Lopetegui han jugado dos partidos muy por debajo de su nivel. Si en Rumanía salió vivo por una acción en solitario, en Sevilla el VAR le ha salvado el cuello al entrenador.

Sin embargo, el público del Sánchez-Pizjuán no se ha contenido y ha expresado su enfado al terminar el partido. Con el equipo en el centro del campo, los más de 31.000 seguidores de las gradas de Nervión ha propinado una sonora pitada a los jugadores y ya son varias en lo que va de temporada. La primera de ellas llegó tras la eliminación copera frente al Mirandés.

De hecho, un sector de la grada ha gritado "Lopetegui, dimisión", un cántico que no ha sido secundado por el resto del estadio. Finalmente, el fallo de Bono y el VAR quedarán en un mal recuerdo. El equipo estará este viernes el bombo de octavos de final de la Europa League. Lopetegui y Monchi deben arreglar la mala dinámica del Sevilla. Su público se está empezando a cansar.