Reguilón y su criticada celebración ante el Cluj: "No puedo cambiar cómo soy"
Si algo ha demostrado Sergio Reguilón a la afición del Sevilla FC es que es un hombre de emociones. El madrileño ha reído, llorado, cantado y celebrado según las circunstancias, y es un hombre que no se guarda ningún sentimiento.
Eso le ha acarreado algunas críticas, como las de muchos sevillistas que no entendieron su efusiva celebración cuando el árbitro letón Andris Treimanis anuló el gol del CFR Cluj por manos, un tanto que habría supuesto casi seguro la eliminación del Sevilla de la Europa League en la ronda de dieciseisavos de final.
Reguilón se ha mostrado en su entrevista en exclusiva con ElDesmarque tal como es, y no ha tenido problema alguno en valorar esa celebración que no sentó bien a algunos. “Estos partidos yo los vivo con una emoción mayor, tanto si fuese aficionado como si estoy en el campo viviéndolo. Entonces cuando pitó la mano sí que es cierto que, a lo mejor, me voy un poquito más de lo que debería hacer en el momento”, reconoce.
Sin embargo, el jugador que llegara cedido por el Real Madrid tiene claro que le va a ser muy difícil controlar esas reacciones por su forma de ser. “Es mi reacción. Vivo el fútbol de una manera muy pasional, al que le guste bien y al que no, no puedo hacer nada. No puedo cambiar cómo soy y lo siento”.
“Fue una liberación, porque ese partido lo tendríamos que matar mucho antes, porque tuvimos ocasiones de sobra para hacerlo"
Además, da Reguilón las razones por las que se mostró eufórico cuando se anuló el gol a los rumanos y cuando se decretó el final del partido. “Fue una liberación, porque ese partido lo tendríamos que matar mucho antes, porque tuvimos ocasiones de sobra para hacerlo. Al final pasamos de ronda, ahora tenemos Atlético de Madrid y luego Roma y hay que darle duro ahora”, culmina el lateral izquierdo sevillista.
