Las incógnitas para los aficionados que quieran ver la Supercopa de Europa

La UEFA anunciaba en el mediodía de este martes que la final de la Supercopa de Europa, que disputarán el Sevilla FC y el Bayern de Múnich, se celebrará con un 30 por ciento del aforo del Puskas Arena de Budapest. Una novedosa noticia dadas las circunstancias de los últimos meses, aunque todavía quedan algunas dudas por resolver.

Por ejemplo, el máximo organismo del fútbol continental no ha aclarado en su comunicado si ese aforo, que con la reducción sería de algo más de 22.000 espectadores, se cubrirá sólo con húngaros, o habrá reparto de entradas para los aficionados del Sevilla y del Bayern de Múnich que quieran presenciar la cita del 24 de septiembre.

Otro detalle a tener en cuenta es si la UEFA y el gobierno de Hungría podrían negociar un acuerdo para flexibilizar las medidas para los aficionados que quieran acudir a Budapest y que provengan de España. Las actuales medidas del coronavirus en el país magiar exige una serie de requisitos para los extranjeros que lleguen.

Así, en la actualidad los españoles que quieran entrar en Hungría deben pasar una cuarentena de 14 días o presentar el resultado negativo de dos pruebas PCR negativas. Pruebas que hayan sido realizadas cinco días antes de la llegada y con 48 horas de diferencia. También en caso de haber superado el coronavirus un certificado médico que así lo indique.