Adiós a la herencia de Arias

El Sevilla FC acusó la marcha de Monchi a la Roma y, felizmente, el de San Fernando regresó y el club retomó la senda de los triunfos. Su primer sustituto en la dirección deportiva fue Óscar Arias, quien había sido uno de sus más estrechos colaboradores en los años anteriores, pero los fichajes que llevó a cabo el onubense apenas han dado rédito con los años.

El hoy director deportivo del Cádiz CF fichó en el verano de 2017 y en invierno de 2018, es decir, hace tres años, y su legado en el equipo nervionense se limita hoy a la presencia de Jesús Navas. El palaciego regresó tras acabar su contrato con el Manchester City, y aunque no deja de ser un fichaje suyo, la sensación es de que el hoy capitán habría regresado sí o sí al Sevilla en ese verano.

Del resto de jugadores que contrató Óscar Arias, a día de hoy sólo queda uno con vinculación con el Sevilla. Se trata de Guilherme Arana, que juega como cedido en el Atletico Mineiro brasileño hasta junio de 2021. Entonces, el equipo de Belo Horizonte tendrá que hacer efectiva una opción de compra obligatoria, por lo que realmente el lateral zurdo ya no volverá a la disciplina sevillista.

Además de Arana y Navas, Óscar Arias incorporó a otros 11 jugadores, de los que cinco fueron cedidos. Geis y Carole llegaron en verano, mientras que en el mercado invernal se hizo con los préstamos de Roque Mesa, Sandro y Miguel Layún. De entre todos ellos, sólo el canario continuó, aunque la opción de compra ya la ejerció el Sevilla en la etapa de Joaquín Caparrós como director de fútbol. En el último día del mercado de esta temporada, Roque Mesa ha rescindido su contrato para marcharse al Real Valladolid.

Del resto de los jugadores fichados, ya no queda nadie. El que más rendimiento dio, sin duda, fue Éver Banega, que se ha marchado libre al Al-Shabab saudí tras acabar el contrato de tres temporadas que firmó. También se han ido definitivamente este verano otros tres jugadores. Simon Kjaer se lo ha quedado en propiedad el Milan tras seis meses de cesión, Corchia ha rescindido y ha acabado fichando por el Nantes, mientras que Nolito, que también acababa contrato, se marchó al Celta de Vigo antes de que acabara la pasada temporada.

Por su parte, Guido Pizarro sólo duró un año y regresó al Tigres mexicano por lo mismo que costó, mientras que Luis Muriel estuvo media temporada más en el Sevilla, salió cedido a la Fiorentina y el Atalanta lo compró en el verano de 2019. El colombiano, que fue el fichaje más caro del club nervionense, ha recuperado en Italia su mejor nivel.

Sí quedan jugadores aún de la planificación que Joaquín Caparrós realizó junto a Paco Gallardo y Carlos Marchena. Vaclik, Sergi Gómez y Munir siguen en el equipo, al igual que Aleix Vidal y Joris Gnagnon, que tras jugar una campaña como cedidos, se quedan al no poder haber sido ‘colocados’ por Monchi. Además, Ibrahim Amadou sigue siendo propiedad del Sevilla, aunque este año probará suerte como cedido en el Angers tras pasar por el Norwich City y el CD Leganés.