Mendizorroza: tres victorias y una batalla épica para el Sevilla
No es Mendizorroza uno de esos estadios donde se acumulen las victorias del Sevilla FC. Tras el tropiezo de la pasada semana en el Metropolitano frente al Atlético de Madrid (2-0), al equipo que dirige Julen Lopetegui le urge ganar para no conceder terreno a sus rivales por los puestos Champions. Sólo tres victorias ha logrado el conjunto de Nervión en Vitoria en toda su historia. Allí ha disputado 16 partidos oficiales, de los que empató seis y perdió siete.
En ese 19 por ciento de triunfos sevillistas en Mendizorroza destacan dos victorias, las dos conseguidas en LaLiga Santander. La de la temporada pasada, lograda en la jornada 4 gracias a una falta directa ejecutada por Joan Jordán. El partido fue controlado por los sevillistas pero el apretado marcador hizo que se llevaran un susto morrocotudo. En la última jugada del partido el Alavés no empató de milagro.
Y una muy recordada por el mismo marcador, 0-1, en la temporada 2001-02. Era la jornada 17 de la temporada en la que el Sevilla FC regresaba a LaLiga Santander tras un caída a los infiernos de LaLiga SmartBank. Joaquín Caparrós estaba en el banquillo dirigiendo a una plantilla confeccionada desde la competitividad y el oficio. El Sevilla ganó una auténtica batalla planteada por el Alavés. Varios jugadores sevillistas acabaron con golpes importantes, en especial Paco Gallardo. Coloccini le dio una auténtica paliza al hoy técnico del filial. Óscar Téllez fue expulsado. Y Javier Casquero marcó el gol de la victoria en el tramo final del choque.
La primera victoria sevillista en el campo del Alavés (0-2) fue en su sexta visita, en la campaña 1968-69, con ambos en LaLiga SmartBank. Lebrón y Canito dieron el triunfo al equipo entrenado entonces por Juan Arza. Una de las seis igualadas conseguidas por el Sevilla FC en Mendizorroza posee un gran valor en su historia. Fue el 1-1 (marcaron el local Iriondo y el visitante Raimundo) que permitió a los andaluces clasificarse para su segunda final de la Copa, la ganada en 1939. Dicho empate hacía bueno el 6-5 de la ida.