Borna Sosa estuvo a un paso de firmar por el Sevilla FC durante el verano pasado. Con el Aston Villa interesado en la incorporación de Marcos Acuña, avalado por la figura de Monchi, el por aquel entonces futbolista del Sttutgart se convirtió en la opción número uno para el lateral izquierdo. Pudo llegar en el mejor momento de su carrera, coincidiendo con el valor de mercado más alto de su trayectoria (23 millones). Todo estaba hecho, todo estaba acordado... pero un contratiempo del argentino lo frustró todo. El croata con pasaporte alemán se vio obligado a buscar alternativas y terminó recalando en el Ajax.
"No estaba al cien por cien seguro, pero estaba bastante seguro de que un cambio (salir de Alemania) funcionaría. Realmente todo estaba acordado con el Sevilla FC, todo estaba acordado conmigo y entre los clubes. Durante mucho tiempo pareció que iba al Sevilla, por lo que no tuve al Ajax tan presente. Pero debido a la lesión de Marcos Acuña, el traspaso no se concretó. El Ajax estaba interesado en mí desde hacía mucho tiempo y sabía que funcionaría si las cosas no salían bien con el Sevilla", ha reconocido en una entrevista para Transfermarkt.
Nacido en Zagreb en enero del 98, aunque también con pasaporte alemán, Borna Sosa se crió en la celebérrima cantera del Dinamo de Zagreb. Quemó etapas desde las categorías más bajas del club hasta llegar a la élite, acumulando 41 encuentros en el primer equipo. Su valía le permitió dar el salto a Bundesliga. El Stuttgart pagó alrededor de seis millones de euros en 2018 por su incorporación y, desde entonces, su nombre no ha dejado de ser relacionado con grandes clubes: hasta el Bayern y el Barça han aparecido alguna vez a su lado.
La figura de Sosa, más allá de su velocidad, su capacidad para encarar y su dulce zurda que le ha permitido sumar más de 30 asistencias en los 115 partidos disputados en la Bundesliga, se hizo altamente popular hace algunos años, cuando cambió su nacionalidad... para arrepentirse poco después. La historia acabó siendo feliz. Croacia le convocó para el primer equipo meses después de su desliz con Alemania, fue protagonista en el Mundial y se convirtió en uno de los mejores de su selección durante el mismo. Ahora, aspira a ser una de las piezas claves de su país en la Eurocopa.