Un revulsivo llamado Carmona

Carlos Carmona revolucionó el partido ante el Castilla desde el banquillo. El mallorquín sustituyó al lesionado Barrera en la primera mitad y fue clave en el triunfo del Sporting. El rojiblanco marcó el primer gol y asistió a Stefan para que anotara el tanto de la victoria.

De los 19 partidos en los que ha estado presente, el jugador solo ha sido titular en seis de ellos. La competencia en el equipo es extrema y más en una posición como en la que juega Carmona, en la que la competencia es máxima por hacerse un hueco en el once inicial.
El pasado sábado en Valdebebas, el jugador nacido en Mallorca demostró que tiene ganas de participar en el equipo y también dejó detalles de la calidad que precede a un hombre que estuvo en el filial de uno de los mejores equipos del mundo como es el Barcelona.
Carmona se dejó ver en todo momento, ocupó los espacios que creaban sus compañeros arriba y estuvo presente en la mayoría de los ataques rojiblanco. Suyo fue el primer gol del partido tras rematar desde la frontal un balón que parecía perdido, sin dueño.
Sandoval ya ha intentado darle protagonismo en la competición con varias titularidades, pero al futbolista le ha faltado regularidad. Su mejor papel en el campo, por lo menos es lo que ha demostrado en lo que va de campaña, es la de revolucionar los partidos desde el banquillo. El rojiblanco aporta velocidad, verticalidad y descaro. Su calidad es incuestionable y ante el Castilla dejó en evidencia a más de un defensa con regates propios de los mejores.
El jugador vio la quinta cartulina amarilla en Madrid por lo que no podrá jugar ante el Recreativo, equipo en el que también militó. El cuerpo técnico confía en Carmona y Sandoval lo comentó nada más terminar el partido: "Es un jugador importante y lo sabemos, llevamos varias semanas viendo el buen trabajo que realiza en los entrenamientos".