Obstaculizados en El Madrigal

El Sporting ha caído ante el Villarreal en El Madrigal, en un partido en el que mereció mucho más. Los de Abelardo tuvieron el balón, más ocasiones que su rival, pero carecieron de contundencia en las dos áreas. Además, el colegiado Gil Manzano anuló un gol a Bernardo y dio legal el primero de Bakambu tras un pase de Soldado, que estaba, por muy poco, en fuera de juego. 

Abelardo, finalmente, apostó por el equilibrio en las bandas, con Álex Menéndez en el interior izquierdo y Carmona en la derecha por delante de Lora. Sin embargo, el Sporting sufrió en los primeros minutos por el costado de Lora. Pero hasta el minuto 10, porque a partir de aquí fue muy superior. El primero en intentarlo fue Sanabria con un remate desviado tras una buena acción de Halilovic. El croata fue de lo mejor, como su asociación con Carmona, muy activo durante la primera parte. 
Con el Sporting dominando llegó el turno del colegiado. Gil Manzano, en un saque de banda, anuló el gol de Bernardo por falta sobre sobre Areola, cuando fue el portero el que golpeó al colombiano con su mano. El potero local pifió, pero Gil Manzano lo 'arregló'. Acto seguido, por si fuera poco, no vio un fuera de juego de Soldado, que asistió a Bakambu para el 1-0. Falló Luis Hernández en la salida de balón, Soriano asistió a Soldado y este a Bakambu, que marcó a placer. 
Esta vez sí, reaccionó el Sporting a pesar del golpe por la lesión de rodilla de Bernardo. Los rojiblancos continuaron con su dominio y pudieron empatar antes del descanso si Halilovic hubiese acertado con un disparo dentro del área con su pierna derecha. Así terminó la primera parte y así comenzó la segunda. Con otro tiro muy malo del croata después de una buena asistencia de Álex Menéndez. 
No se asustó el Villarreal, aunque en realidad se encontró el segundo gol. No estuvo fino el Sporting para alejar el peligro y Bakambu aprovechó la concesión para hacer un golazo. 2-0 pero aún restaban 40 minutos. 
Lo sabía el Sporting, que se sentía superior, y siguió intentándolo por todos los medios, haciéndose con el balón y las ocasiones. Pero a los de Abelardo les faltó definición, sobre todo a Halilovic que lo hizo casi todo bien fuera del área pero que suspendió dentro de ella. Tuvo varias ocasiones, también Sanabria, Cases, Jony... No entró ninguna y al final la derrota fue inevitable. La sexta consecutiva a domicilio, aunque con otras sensaciones. El Sporting mereció mucho más, pero se encontró con demasiados obstáculos. También con su reiterada falta de contundencia en las áreas.