No fue penalti y gol anulado por la presión local

El Sporting B perdió este domingo por tercera vez en lo que va de temporada, como consecuencia del empuje del Tudelano, pero sobre todo debido a las decisiones claves del colegiado Carrero Romera. Señaló un penalti que no fue en contra de los rojiblancos, anuló el gol del empate tras las protestas locales y pasó por alto una posible falta a Sanabria dentro del área local. Pese a todo, el filial sigue en los puestos que dan acceso a la lucha por el ascenso a Segunda división.

Los pupilos de José Alberto terminaron indignados por la actuación de árbitro, determinante en el resultado del final. En la segunda parte señaló un penalti muy riguroso que, además, se produjo fuera del área. La decisión de Carrero Romera supuso el tanto de la victoria del Tudelano. 
Tras el golpe, los de Mareo pudieron empatar en una ocasión muy clara que Claudio no amortizó. Finalmente, el balón sí que terminó entrando en la portería local después de un saque de esquina que cabeceó Joel Sanabria. Entonces, el colegiado ya se iba al centro del campo cuando sintió las protestas a su asistente. Se giró, habló con su ayudante y este le comentó una falta que no había observado segundos antes. O al menos no había levantado su banderín. Todo esto se produjo instantes después de la celebración de los rojiblancos, incrédulos ante la sorprendente y tardía rectificación.
La indignación de los canteranos fue aún mayor en los instantes finales. Sanabria se dispuso a controlar dentro del área bajo la oposición de un rival, que en su intento de alejar el peligro no llega a conectar con el balón. El hermano de Tonny se fue al suelo pero el colegiado no apreció infracción.
En cualquier caso, y a pesar de la evidente trascendencia en el marcador final, el técnico José Alberto fue muy moderado en su valoración de la actuación arbitral. Incluso, reconoció al Tudelano como “justo vencedor por el juego desplegado”.