Dos ultras con orden de alejamiento se reunieron con el club

En su momento, hace poco más de un mes, resultó sorprendente la imagen. Miembros de Ultra Boys acudían a Mareo para reunirse con Fernando Losada, consejero del Sporting, con motivo de los homenajes a Enrique Castro Quini. La fotografía confirmaba la buena sintonía entre las dos partes, la misma relación cuyo cese ha exigido el Ayuntamiento en el pleno del miércoles. En esa reunión, impulsada por el club, también estaban los portavoces de la asociación de veteranos, la fundación Anselmo López, la Federación de Peñas y de Unipes.

Cuestionable la primera medida, El Comercio ha desvelado que dos de los integrantes que formaron parte del encuentro, el pasado 7 de marzo, se encuentran pendientes de juicio por la agresión a 10 policías nacionales en la previa del derbi disputado en Gijón. Se trata de Alfonso T. M. y Ángel V. L, para quienes pesa una orden de alejamiento a El Molinón. El primero de ellos, incluso, se encuentra en calidad de investigado judicial por los disturbios que rodearon la muerte violenta de Jimmy, seguidor radical del Deportivo fallecido en Madrid en 2014.
Conocida esta situación, la entidad asturiana ha asegurado que desconocía el conflicto judicial en el que están inmersos estos dos hinchas. Una explicación que proyecta despreocupación, desistimiento, su incapacidad para abordar y concienciarse del problema que tiene en su grada de animación de El Molinón. Si nada lo cambia, este mismo domingo, el grupo Ultra Boys estará presente en el Estadio José Zorrilla durante la visita del Sporting al Valladolid.