2-0, Jose Fran (m. 77)
Una buena mañana para sonreír otra vez
En un partido las sensaciones en el Sporting de Gijón han cambiado para mejor. Las dudas entorno al equipo se han disipado por el momento. La goleada del jueves ante el Almería ha tranquilizado las cosas por Mareo. Ahora toca ya pensar en el Fuenlabrada.
Los rojiblancos quieren los tres puntos para acabar la semana sumando seis puntos de seis posibles, para terminar con los fantasmas y los dudas que rodeaban al nuevo proyecto del conjunto gijonés.
La línea a seguir
Ante el Almería se pudo ver un equipo con pegada, aquella que tanto se echaba en falta en partidos anteriores. Juego rápido y atrevido, un equipo valiente tal y como pedía el técnico.
El Sporting que tanto demandaba la afición surgió con un Manu García muy móvil, con libertad para buscar apoyos. Álvaro Vázquez como delantero habilitando los huecos necesarios para que los hombres de segunda línea los aprovechasen. Un plan que tuvo efecto, la línea a seguir.
El Fuenlabrada es un equipo aguerrido, intenso en cada acción. Un reto importante para el Sporting, un recién ascendido que juega con atrevimiento y personalidad, sin complejos.
Los gijoneses van a Madrid con el objetivo de demostrar que el equipo ya ha encontrado la ruta adecuada, con la dosis de eficacia y valentía necesaria. Los de José Alberto deberán volver a sacar la versión que se vio contra el Almería, la de un Sporting protagonista y atrevido.