Entre el deseo y la realidad: el sportinguista que ansía una oferta de renovación que no llega
La baja por sanción de Uros Djurdjevic permitió a Pablo Pérez estrenarse como titular esta temporada en LaLiga SmartBank el pasado domingo contra la SD Ponferradina. Hasta la fecha, el delantero del Sporting de Gijón apenas sumaba 108 minutos en la competición doméstica, pero en El Toralín fue el más destacado de los rojiblancos, con un gol y un penalti provocado.
Su gran actuación en Ponferrada parece haber cambiado su situación en el equipo que entrena David Gallego. Pero aun así, su futuro sigue en el aire ya que acaba contrato el próximo 30 de junio y, por el momento, no ha recibido oferta alguna de renovación, como ha ocurrido con otros canteranos, como es el caso de un Pedro Díaz que este miércoles ampliaba su vínculo con el Sporting hasta 2025.
Este jueves, el propio Pablo Pérez analizaba la situación en la sala de prensa de Mareo: "Tengo un año más de contrato y no pienso en otra cosa que no sea disfrutar cada día en Mareo, cada entrenamiento y cuando acabe la temporada tocará valorar qué pasa. Es algo que no depende solo de mi. Si el club cuenta conmigo yo estoy encantado de seguir aquí, aportando y peleando por cada minuto, que es un orgullo llevar esta camiseta", aseguraba.
Sea como fuere, el gijonés se siente arropado por sus compañeros y asume su rol secundario mientras trata de vivir el día a día: "No siento una presión especial. Yo intento disfrutar de estar en el Sporting, en el equipo de mi ciudad, del que soy desde pequeño. Es un orgullo, intento entrenar siempre a tope, estar disponible para el entrenador y cuando llegue la oportunidad intentar aprovecharla. A seguir trabajando, pensar en el siguiente entrenamiento, ese es el camino", apuntaba.