La reacción del Sporting de Gijón se quedó a medias, pero al menos rescató un punto. Pocas conclusiones se pueden extraer del empate cosechado ante el Lugo en un partido falto de ritmo, que fue de menos a más pero en el que los rojiblancos no supieron aprovechar la superioridad numérica en la última media hora de partido para culminar la remontada.
El partido arrancó escaso de ritmo, con dos bloques ordenados y con poco movimiento. Las acciones de peligro escasearon y solo llegaron con tiros lejanos. Primero lo intentó Djuka y más tarde Aitor, pero ambos lanzamientos se fueron muy arriba. El serbio disfrutó de otro golpeo dentro del área, pero el portero lo cazó.
Mientras tanto, el conjunto gallego solo lo intentaba en jugadas a balón parado y con balones colgados desde los costados. Sin aparente peligro. Hasta el minuto 34, en el que Mariño fue el protagonista tras un tremendo paradón ante la volea de Señé. Una acción que despertó a ambos equipos y a El Molinón.
El duro golpe llegó al borde del descanso. Carrillo remató un centro desde la banda derecha para superar a Mariño y convertir el silencio en silbidos desde la grada tras finalizar la primera parte.
En el segundo acto, pese a que comenzó con otro paradón de Mariño a tiro de Señé, se pudo ver a un Sporting más activo, tratando de buscar con más rapidez el área contraria. Pese a que no se tradujo en ocasiones, llegó el premio. Villalba asistió a Aitor y este, dentro del área, golpeo con rosca y ajustado al palo para conseguir la igualada.
El partido cambiaba y más que cambiaría. Tres minutos después, Gerard Valentín era expulsado tras una entrada por detrás sobre Kravets. El Sporting contaba con un jugador más y media hora por delante. Los de Gallego se hicieron dueños del balón, pero las ocasiones claras no llegaban. El Lugo, mientras tanto, seguía intentándolo.
Las fuerzas empezaron a escasear en ambos conjuntos y el marcador ya no se movería. El Sporting empieza el 2022 con un punto que deja sensaciones agridulces en un equipo que necesita sumar de tres en tres para escalar.