Pasen, vean y disfruten del gran derbi asturiano
El Sporting de Gijón pretende romper su mala racha de resultados en sus enfrentamientos con el Real Oviedo en un derbi al que los ovetenses llegan mucho mejor clasificados y que se disputará en un ambiente de polémicas y malas relaciones entre ambos clubes que hará que apenas haya presencia de la afición azul en El Molinón.
A pesar de los 13 puntos que los oviedistas sacan al Sporting, nadie se confía de cara a un duelo de gran rivalidad en el que, ante la negativa del Sporting de enviar entradas a la afición rival, los seguidores carbayones se han visto obligados a arengar a los suyos en la última sesión de trabajo, como harán mañana de nuevo el mismo día de partido para despedirles a la salida del hotel de concentración.
El derbi local tiene más importancia para el Real Oviedo que quiere mantenerse en los puestos de play off que para un Sporting que, muy lejos de los objetivos iniciales, que no eran otros que tratar de luchar por el ascenso, ve en este partido una de las pocas ocasiones que le quedan para dar una alegría a sus aficionados.
El Oviedo, que ha ganado tres y empatado uno de los últimos cuatro choques con los gijoneses, todos los disputados con Ziganda como entrenador, jugará el derbi en puestos de promoción, objetivo que lleva marcándose desde que volviera a Segunda en 2015 y que solo esa primera temporada tuvo más cerca que ahora.
Los azules, sextos con 54 puntos, tienen uno de ventaja sobre Las Palmas y si la Ponferradina, con tres puntos menos, pierde ante el Eibar, el conjunto oviedista acabará la jornada en 'play off' pase lo que pase en El Molinón.
En este quinto derbi para Cuco Ziganda, el técnico azul no podrá contar con Costas y Montiel, sancionados, ni con el apoyo de la afición en El Molinón, pero contará con la motivación de sentirse fuerte ante su eterno rival y sabiendo que se encuentra en el mejor momento de la temporada.
Pep Martí recuperará a Babin en defensa y Djurdjevic en la delantera mientras que el resto del equipo no diferirá mucho del que viene alineando en las últimas jornadas en las que los rojiblancos han mejorado su trayectoria con una victoria y tres empates lo que le ha servido para tomar una ventaja de 10 puntos sobre las posiciones de descenso.
Las principales dudas en la alineación inicial del Sporting están en la defensa en la que parece segura la vuelta de Babin pero se mantiene la incertidumbre de quien le acompañará como pareja de central con Borja López y Berrocal como principales alternativas ya que Martí no parece contar con Marc Valiente al que no utilizó desde su llegada.
La defensa está siendo la línea que más dudas ofrece ya que está encajando goles por falta de concentración lo que podría motivar algún cambio además de la vuelta de Babin si bien en los laterales la presencia de Bogdan y Kravets también parece segura.
En el Oviedo, por su parte, Tarín sustituirá a Costas en el centro de la zaga y aunque Luismi no ha completado la última sesión de la semana por precaución, todo apunta a que mantendrá su puesto en el once junto a Gastón Brugman, aunque Jimmy y Javi Mier están a disposición por si el gaditano sufre algún problema de última hora.
Bastón, pichichi con 18 dianas, seguirá siendo la mejor baza ofensiva de un Ziganda que apuesta en la mayoría de ocasiones por el 4-4-2, que ya ha ganado dos veces en El Molinón como técnico del conjunto carbayón y que si repite triunfo llevará a los oviedistas a la mejor racha de la temporada, con cuatro seguidos.
El Molinón registrará la mejor entrada de la temporada, aunque sin aficionados azules ni representación oficial del club carbayón ni del consejo de administración ni del Ayuntamiento de Oviedo, a pesar de las constantes llamadas a la reconciliación incluso por parte de los dos entrenadores.