Ni siquiera la ausencia del capitán es un problema
El Valencia CF pulveriza récords y pisotea estadísticas. Los de Marcelino no bajan el pistón y a pesar de lo complicado que fue llevarse los tres puntos de Mendizorroza, parece que los valencianistas se crecen y se dejan todo tipo de complejos fuera del campo antes de pisar el césped en cada encuentro. Con la victoria ante el Alavés, el Valencia CF puso fin a una racha de casi tres años sin ganar un partido sin la presencia de Dani Parejo.
Esta vez, la ausencia del '10', que en los últimos tiempos siempre había sido una pesada losa, no supuso ningún problema. El equipo supo rehacerse y sobreponerse a una ausencia muy importante como es la del centrocampista de Coslada.
Todas las alarmas se encendieron una semana antes cuando Parejo vio la quinta tarjeta de la temporada ante el Sevilla. Cuestión de tiempo ya que era una situación que llegaría tarde o temprano. Una vez confirmada su ausencia, Marcelino trabajó durante toda la semana con Carlos Soler en esa posición de '8'. El canterano fue el elegido para suplir a Parejo ya que es su posición natural aunque esta temporada Marcelino le ha concedido un papel protagonista en la banda derecha del ataque donde el 'chino' se ha adaptado a las mil maravillas.
La influencia de Parejo en el juego del Valencia CF es capital. El equipo juega a lo que juega el '10' y si él no está, el bloque lo acusa sobremanera. Tanto que en los últimos tres años, el Valencia CF había sido incapaz de ganar un choque en el que no estuviera Parejo.
Pero en esta ocasión no fue así. El Valencia CF está lanzado y convencido de hacer cosas grandes y ni siquiera la ausencia de su capitán este pasado sábado iba a suponer un problema que impidiese llevarse los tres puntos para seguir con paso firme en lo alto de la clasificación.