Otro empate que vale para poco
El Valencia CF empató sin goles ante el Athletic de Bilbao en el Nuevo San Mamés. Fue un Athletic-Valencia CF disputado en el que ninguno de los dos equipos podía permitirse el lujo de fallar y eso se notó sobre el césped. Fue un encuentro poco vistoso en el que el miedo y las defensas se impusieron a las delanteras. Octavo empate del Valencia que vale para poco. El equipo no pierde, pero tampoco gana y sigue sin marcar.
Marcelino salió de inicio con Neto, Gayá, Rubén Vezo, Gabriel Paulista, Garay, Kondogbia, Parejo, Coquelin, Carlos Soler, Rodrigo, Batshuayi. Sin extremos y sin Wass. Y pronto empezó su equipo a apretar los dientes. Como pedía el técnico Berizzo, desde el primer minuto había que encimar al Valencia, y Capa probó los reflejos de Neto en la primera jugada del choque.
Fue un destello fugaz que dio paso a un fase de centrocampismo provocada, entre otras cosas, por la presencia de siete mediocentros en el césped. En el 17 Batshuayi, sin embargo, tendría en sus botas la primera gran ocasión del partido. Coquelin lo dejó solo, el belga encaró a Herrerín pero se equivocó y disparó muy suave acabó manso en las manos del meta vasco. Rodrigo, sólo al otro lado, se desesperaba.
La siguiente opción salió de la nada, de las botas de un Kondogbia que, desde media distancia, probó suerte. Su disparo se fue desviado por poco. San Mamés enmudeció.
Tras unos minutos de faltas, amarillas y juego poco fluido, el encuentro llegó al ecuador, momento que Marcelino aprovechó para sentar a Batshuayi, amonestado por protestar y muy disperso, para dar entrada a Gameiro.
La tónica no cambió, si bien es cierto, el Athletic imprimió una velocidad más y, con su clásico juego directo y colgando balones al área, parecía que tenía alguna opción más para desnivelar un choque soso, aburrido, peleado, pero poco vistoso. Hasta el 61 no se acercaría el Valencia hasta el área rival. Fue una gran jugada entre Parejo, Soler, Rodrigo y de nuevo Parejo que, en buena posición para rematar, se entretuvo demasiado.
Otro gol que no sube por el VAR
Con Rodrigo más entonado, el equipo mejoró algo en ataque. La lluvia arreció y le dio un punto más de velocidad e intensidad al choque y así llegó la jugada decisiva del partido. Rodrigo remató un centro medido de Parejo al larguero, Herrerín y el larguero la despejan. El rechace es rematado por Kondogbia y, cuando el balón enfilaba la red, Gameiro, en fuera de juego, molestó a Herrerín mientras la pelota entró. Undiano lo anuló a instancias del linier y, tras consultar el VAR, confirmó su decisión.
Aún tuvo otra oportunidad Rodrigo, tras una buena opción de Gameiro, pero el electrónico no se movería y el Valencia