Lacazette y Aubameyang también dinamitan el 4-4-2
El Valencia-Arsenal no sólo era un enfrentamiento entre dos equipos de primer nivel, sino también una batalla táctica de Marcelino García Toral y Unai Émery. El asturiano planteó el partido con inteligencia, pero las individualidades le dieron al Arsenal el pase a la final de Europa League (2-4).
Lacazette y Aubameyang volvieron a marcar las diferencias. Al igual que sucedió en Londres, la pareja de delanteros hizo estragos. El 5-3-2 no los paró y el 4-4-2 tampoco.
Vuelta a los orígenes
Después de abandonar su habitual 4-4-2 en el Emirates Stadium para apostar por un inesperado 5-3-2, uno de los aspectos más esperados del encuentro de vuelta era conocer cual sería el planteamiento táctico que se utilizaría en Mestalla para buscar la remontada.
En esta ocasión, Marcelino evitó las sorpresas y recuperó su dibujo habitual. El Valencia CF formó con Neto; Piccini, Garay, Gabriel, Gayà; Wass, Parejo, Coquelin, Guedes; Rodrigo y Gameiro. Unai Émery, por su parte, repitió el esquema del partido de ida y su Arsenal volvió a posicionarse en un 3-5-2 formado por Cech; Sokratis, Monreal, Koscielny; Maitland-Niles, Xhaka, Torreira, Kolasinac; Ozil; Lacazette y Aubameyang.
La personalidad del Valencia CF de Marcelino se sustenta en ese 4-4-2 en el que encuentra el equilibrio. Se siente seguro en defensa, ataca a través de Parejo y Rodrigo y, sobre todo, tiene automatizadas las transiciones en ataque.
Precisamente uno de esos contragolpes se abrió el marcador a favor de los valencianistas. A los 11 minutos, Kevin Gameiro abrió el marcador. El delantero francés apareció en el segundo palo para culminar un rápido contragolpe que se había iniciado en la portería de Neto y que condujeron Gonçalo Guedes y Rodrigo Moreno.
El gol no cambió el plan del Valencia CF, que continuó atacando incluso con más insistencia. Sin embargo, un despiste en defensa fue aprovechado por el Arsenal FC para hacer el 1-1 y apagar la intensidad valencianista. El Valencia CF entendió que debía tomarse un respiro y dar un paso atrás.
Un cambio de planes que permitía recuperar oxígeno al mismo tiempo que buscaba hacer daño a la contra a una adelantada defensa del Arsenal. Así, durante el tramo final del primer tiempo, los ataques del Valencia CF siempre fueron balones largos que buscaban explotar los espacios que dejaban los gunners. La banda izquierda con Guedes y Gayà doblándole fue el principal foco de peligro.
Todo o nada
En la segunda parte del Valencia-Arsenal, cualquier planteamiento previo saltó por los aires en pocos segundos. A los 51 minutos, Lacazette hizo el 1-2 para los Gunners y Marcelino se tuvo que jugar el todo por el todo.
Su primera decisión fue retirar a Cristiano Piccini para dar entrada a Carlos Soler y situar a Daniel Wass en el lateral derecho. Un cambio con clara vocación ofensiva que marcaría la filosofía del equipo. Se consiguió marcar el 2-2 gracias a otro tanto de Kevin Gameiro, pero el Arsenal apagó cualquier conato de remontada firmando el 2-4.
De hecho, Marcelino dio entrada a Santi Mina y Ferran Torres en lugar de Gonçalo Guedes y Rodrigo Moreno, para dar descanso a dos jugadores que serán clave en la pelea por la cuarta plaza.