La petición de Ribó al Ministro Illa sobre los entierros que puede beneficiar a Valencia
El alcalde de València, Joan Ribó, ha solicitado por carta al ministro de Sanidad, Salvador Illa, que flexibilice las restricciones de acceso a los entierros y permita la entrada a todos los familiares de primer grado. Ribó ha argumentado razones humanitarias para pedir que las personas más vinculadas al fallecido puedan asistir al funeral en lugar de un máximo de tres, como se estipula en estos momentos. En todo caso, siempre debería hacerse siguiendo las normas de seguridad en medio del confinamiento por el coronavirus, según el alcalde, que ha anunciado que el Ayuntamiento homenajeará a los fallecidos cuando pase la situación actual y "haremos posible que las familias puedan recordar a sus seres queridos como es debido".
Ribó pide que se permita a todos los familiares directos acceder a los entierros.
Para Ribó, que se restrinja a un máximo de tres familiares o afines la asistencia a entierros o ceremonias fúnebres "comporta un importante impacto emocional en las familias de las personas fallecidas, ya que en algunas ocasiones ni tan solo pueden participar en la despedida algunos familiares de primer grado, independientemente de la adopción de las medidas sanitarias de protección al personal trabajador que intervenga y a los propios asistentes".
🗣️ L'alcalde ha sol·licitat per carta a @sanidadgob que es flexibilitzen les restriccions d'accés als soterrars durant la crisi provocada per la #COVID19, per a permetre que tots els familiars directes puguen assistir al funeral de la persona difunta💐.
ℹ️ https://t.co/xGUjlCcxpF pic.twitter.com/f0qFIkNlUP— Ajuntament València (@AjuntamentVLC) 27 de abril de 2020
Por ello, solicita permitir la asistencia al acto de despedida, bien al acto de inhumación, bien al acto de cremación, a las personas más vinculadas al fallecido, como los familiares de primer grado de consanguinidad, que así lo deseen.
Sobre el homenaje a los fallecidos, ha señalado que el Ayuntamiento posibilitará que las diferentes confesiones religiosas puedan realizar sus actos, con objeto de despedir adecuadamente y con el criterio que consideren conveniente a las personas que han fallecido.
