Oficial: Racic amplía su contrato con el Valencia hasta 2024 y una cláusula de 150 millones
Ya es oficial. Uros Racic renueva su contrato con el Valencia CF y lo amplía hasta junio de 2024. El centrocampista serbio mejora en su relación contractual con el club de Mestalla y la entidad blinda con una cláusula de rescisión de 150 millones de euros, a uno de los futbolistas con mayor proyección de la plantilla valencianista.
Club y jugador llevaban varias semanas con una negociación que ha llegado a buen puerto y que quedó culminada este jueves con la firma definitiva del nuevo contrato del futbolista.
Este es el comunicado con el que el Valencia ha anunciado la renovación del serbio: "El Valencia CF ha llegado a un acuerdo con Uroš Račić para ampliar su contrato como valencianista hasta el 30 de junio de 2024, con una cláusula de rescisión de 150 millones de euros."
La trayectoria de Uros en el Valencia
Racic llegó al Valencia en el verano de 2018 procedente del Estrella Roja y como una apuesta de futuro a largo plazo. En la primera temporada militó en el VCF Mestalla en la primera mitad y luego cedido en el Tenerife durante la segunda mitad de la campaña. Posteriormente, en la segunda campaña jugó en el Famaliçao de la Liga portuguesa, también cedido a préstamo. Allí dejó una gran imagen y ambas experiencias le han servido al serbio para crecer considerablemente respecto al futbolista que arribó al Valencia hace poco más de dos campañas.
Racic demostró su potencial en el derbi
Rumores de mercado al margen. el serbio apuntaló y dotó de equilibrio al equipo de tal manera el centro del campo que apagó los fogonazos levantinistas cuando estos se venían arriba en busca del tercer gol. Racic formó dupla con Kondogbia y ambos actuaron de forma paralela en fase defensiva, algo que dotó al equipo de una consistencia que faltaba cuando Esquerdo se encontraba sobre el terreno de juego.
Racic demostró una gran personalidad y una madurez notable en un momento del encuentro que no era sencillo. Ganó todos los duelos individuales que se le presentaron por delante. Robó con fuerza y contundencia, fue al suelo cuando el guión lo exigía, y jugó fácil para oxigenar a su equipo cuando más lo necesitaba. Con el balón en los pies no se complicó y buscó la solución más fácil para jugar con criterio. El serbio dio todo un recital de posicionamiento y contundencia en los 20 minutos que disputó ante el Levante, incluso se atrevió a incorporarse al ataque en más de una ocasión. Disparó potentemente sobre la meta granota aunque su disparo no cogió portería.