Peter Lim compra las 17.600 acciones del Valencia que estaban en subasta
El máximo accionista del Valencia CF, Peter Lim, ha sido el comprador de las 17.600 acciones del club de Mestalla que estaban en subasta hasta este viernes, tal y como ha podido confirmar ElDesmarque Valencia.
A pesar del desmantelamiento del equipo, el magnate de Singapur no ha querido dejar pasar la oportunidad de seguir haciendo acopio de acciones del club y reforzar así, la mayoría del capital social del club en su poder.
Peter Lim refuerza su mayoría accionarial
La situación social, económica y deportiva ha suscitado de nuevo el interés por comprar títulos para un hipotético cambio de la propiedad, cuya mayoría accionarial en la actualidad está en manos de Peter Lim, reforzada tras esta compra. El empresario singapurés cuenta con algo más del 82,33% de las acciones a su nombre. Ahora un poco más después de esta compra.
El portal de internet que las subata arrancó la puja para adjudicar 17.600 acciones del club valoradas en 105.600 euros (su valor nominal actual), lo que supone un precio de seis euros por acción. El portal eactivos.com, especializado en la liquidación de activos procedentes de empresas en concurso de acreedores, no ha dado detalles de la procedencia del paquete accionarial del club de Mestalla, aunque sí de que se trata de un proceso que pertenece al Juzgado Mercantil 3 de Valencia.
No hay que olvidar que, en la actualidad, el capital social del Valencia CF está fijado en 21.5 millones de euros repartidos en 3.598.596 acciones con un valor de 6 euros cada una. De ahí que estas 17.600 apenas tengan un valor residual.
Ya se subastaron 70.980 acciones de Vicente Soriano
Hace unos meses, este mismo portal sacó a la venta tres paquetes de acciones del expresidente del club Vicente Soriano que sumaban un total de 70.980 títulos. Esta nueva subasta se produce cuando varias plataformas contrarias a la gestión del inversor Peter Lim, como Libertad VCF, máximo accionista del club, han iniciado procesos para agrupar acciones hasta juntar en un primer momento el uno por ciento del accionariado del club y poder así fiscalizar las cuentas y operaciones de la entidad.
