El Valencia CF ha estallado tras la decisión del Comité de no cerrar el Metropolitano o el Coliseum por incidentes racistas similares a los que provocaron que Mestalla estuviera cerrado tres partidos. El club ha criticado con dureza la decisión al enterarse que el Comité de Apelación estima el recurso del Atlético de Madrid respecto al cierre parcial del Estadio Metropolitano durante dos partidos a consecuencia de los insultos racistas a Nico Williams. Además, también levanta la multa económica que el Comité de Disciplina había puesto al club rojiblanco, que ascendía a 20.000 euros. Apelación considera que fue "un incidente aislado" por "un único sujeto" y entiende que "el club ha colaborado" para identificar al autor.
Se repite la historia, para indignación del Valencia CF, pues hace dos semanas era el Getafe el beneficiado. El Getafe se libraba de la sanción con el cierre parcial del Coliseum. El Comité de Apelación de la RFEF también estimba las alegaciones presentadas por el club azulón y no tendrá que cerrar una parte de la tribuna descubierta de su grada durante tres partidos. El castigo, que había llegado tras los insultos racistas de un aficionado a Marcos Acuña, ha quedado sin efecto.
Tras los hechos, el director corporativo del Valencia CF, Javier Solís, aprovechando su presencia en un acto conmemorativo de los 20 años de la última Liga organizado por la SER y el diario As, se ha mostrado indignado. Así, al se preguntado por su opinión porque no se ha actuado igual que con el Valencia CF, el directivo ha explicado: "En primer lugar es un tema que ya reiteramos en su momento la lucha contra el racismo es siempre, todos los días y sin ningún género de duda. Dicho esto, es flagrante la diferencia de trato que sufrimos nosotros, que sufrió el club, que sufrió su afición en un momento de la temporada crítico. Hay veces que da que pensar si si hay jugadores de Primera, jugadores de segunda, equipos de Primera equipos de Segunda, porque parece que según la camiseta que lleven pues se actúa de una manera u otra
"Hay veces que da que pensar si si hay jugadores de Primera, jugadores de segunda, equipos de Primera equipos de Segunda, porque parece que según la camiseta que lleven pues se actúa de una manera u otra"
Solís, que es abogado, explica que ha podido leer que se admitía el escrito de apelación "porque el club había actuado de la manera más diligente posible. Pues bueno, creo que quedó demostrado en su momento que el Valencia actuó con una rapidez absolutamente extrema, se expulsó al día siguiente, o a los dos días a los aficionados para siempre. Es decir... Da que que pensar y es una lástima la diferencia de criterio que hay", asegura el director corporativo.