Sergi Canós fue una de las grandes sorpresas en el once titular de Rubén Baraja ante el CD Leganés. Por primera ocasión en toda la temporada 2024/25, fue de la partida. De hecho, hasta este viernes, había estado condenado a jugar minutos residuales: 64' repartidos en cinco jornadas, de los cuales únicamente 16' en los tres partidos en los que el Valencia CF había puntuado. Sin embargo, el de Nules no ha dejado de trabajar y le llegó la oportunidad en Butarque, donde no dio la talla.
En los primeros 45 minutos, Sergi Canós lo intentó y de mostró voluntarioso, pero quizás por la falta de ritmo estuvo algo lento y sobre todo errático a la hora de tomar decisiones. Un pase mal dado por su parte, por ejemplo, echó abajo un claro contraataque en el que corrían junto a él Hugo Duro y Luis Rioja.
La segunda mitad la empezó mejor, pero pronto se diluyó. En una carrera en ataque, provocó una falta muy peligrosa en el frontal que Hugo Duro desperdició con un tiro flojo y a media altura que golpeó en la barrera. Con el nivel mostrado, su cambio antes o después estaba cantado y fue el primero que hizo Rubén Baraja en todo el partido. Diego López le sustituyó en el minuto 62.
Como se ha comentado, su participación venía siendo residual, pero Rubén Baraja creyó que en este nuevo esquema podía acoplarse bien. Esto fue lo que dijo sobre el de Nules el pasado 27 de septiembre: "Está trabajando bien, preparado para cuando tiene que participar. Cuando aumente la competencia, es más difícil tener minutos. Tiene sus minutos y sus momentos. Tiene que trabajar para que la gente que entra desde el banquillo nos dé un buen nivel. Darle la vuelta a la situación e incluso poder tener más minutos. Ahora está jugando Luis y está a un buen nivel. Eso es lo que sube el nivel del equipo. Que haya dos jugadores por puesto es una máxima que nosotros queremos porque hace mejor al equipo".
Esta fue la valoración que hizo en rueda de prensa de su actuación: “Sergi es un jugador que desde dentro te puede dar un buen pase, que puede llegar a zona de disparo, ha trabajado bien, 60 minutos, venía tiempo sin salir de inicio".
Terminó el partido, hubo bronca dentro del estadio e insultos fuera, hasta el punto de que Pepelu y Sergi Canós tuvieron que bajar del autobús para calmar a la afición, como puedes verlo en el vídeo que aparece a continuación. Después, Rubén Baraja también se acercó y terminó aplaudido.