Koeman, que entrenó al Barcelona durante la temporada 2020-21 y el principio de la 2021-22, no pudo dirigir al equipo culé desde el banquillo en su visita a Mestalla el 2 de mayo de 2021 porque fue expulsado en el partido anterior, aunque sí estuvo en el estadio del Valencia CF, al que dirigió en 34 partidos oficiales.

La etapa del neerlandés en el club valencianista fue convulsa y estuvo marcada por altibajos. Koeman llegó al banquillo del Valencia en octubre de 2007, sustituyendo a Quique Sánchez Flores y con el equipo en puestos europeos. En menos de seis meses al frente del equipo, ganó un título, pero estuvo cerca de descender a Segunda División, lo que se evitó con Voro en el banquillo sustituyendo al neerlandés cuando fue destituido.
Apartó a Cañizares, Albelda y Angulo
Koeman llegó como una gran apuesta de la dirección deportiva después de ganar la Eredivisie, pese a tener contrato en vigor con el PSV Einhoven, y a su llegada apartó del equipo a jugadores importantes como Santiago Cañizares, David Albelda y Miguel Ángel Angulo, una decisión que, junto a los cambios en el sistema de juego, generaron mal ambiente y tensiones en el equipo que desembocaron en una mala dinámica por la que finalmente fue destituido en abril de 2008.

El entrenador fue despedido después de alzar la Copa del Rey, el penúltimo título del club valencianista tras la Copa del Rey lograda bajo la dirección de Marcelino García Toral en 2019, y que ni se celebró, debido a los importantes compromisos ligueros en los que el Valencia se estaba jugando la permanencia.
La maldición de Ronald Koeman
El técnico holandés, no contento con haber llevado al equipo a puestos casi de descenso y haber apartado tres jugadores emblema del club, lanzó una maldición tiempo después de haber sido despedido. . Y es que, el divorcio de Ronald Koeman con la mayoría de sus jugadores y afición era tan grande y evidente que nada más ganar la Copa del Rey trascendió una anécdota que tuvo lugar en la misma cena de celebración del título. En ese momento, aseguran los presentes, vino a decir: "Celebrad bien este título, porque es el último que vais a ganar en mucho tiempo".

En 2011 Ronald Koeman, aseguró que el título de Copa del Rey que ganó en 2008 sería el único que ganaría en cinco años. Fue en la previa de un Barcelona-Real Madrid y, por desgracia pasaron no cinco, sino once desde que el Valencia ganara el último título
Once años después, el club lograba en el Benito Villamarín de Sevilla en 2019 su primer titulo dando al traste la dichosa maldición. Es por eso que hoy se cumple el quinto aniversario de una Copa maldita que no llegó ni a celebrarse.
Después de su paso por el banquillo del Valencia, estuvo en el AZ Alkmaar, Feyenoord, Southhampton, Everton, Países Bajos y el Barcelona antes de volver a dirigir a la selección de su país.
0 comentarios