Mientras el Nou Mestalla avanza, dentro y fuera del óvalo con acuerdos como el alcanzado con Legends, la oposición municipal y algunos grupos de aficionados dudan de la viabilidad del proyecto presentado. Así, el grupo municipal de Compromís en el Ayuntamiento de València exigió este miércoles "explicaciones públicas e inmediatas sobre la tramitación de las obras del Nou Mestalla" tras la presentación por parte del colectivo 'Últimes Vesprades a Mestalla' de un contencioso-administrativo contra el consistorio por la falta de respuesta a las alegaciones registradas en enero.
Esta asociación anunció el martes la presentación de este recurso en los juzgados al no haber recibido respuesta del consistorio a sus cuatro escritos en los que denunciaba que, según su criterio, el proyecto de ejecución que le valió al Valencia para que se le concediera la licencia no era tal y que el propio proyecto del club contiene, en su opinión, importantes deficiencias técnicas y que no aporta la información económica que requiere.
A esto se ha acogido Compromís que llevará el asunto al pleno. “Es inadmisible que ante un proyecto con una gran trascendencia social, económica y urbanística, el gobierno de (María José) Catalá no haya respondido ni siquiera formalmente a una instancia ciudadana que alerta de graves deficiencias técnicas y legales en el proyecto de ejecución y el proyecto básico presentado por el club”, lamentó su portavoz Papi Robles.
Compromís ha registrado una pregunta formal dirigida al concejal de Urbanismo, Juan Giner (PP), para que dé explicaciones sobre esta situación en el próximo Pleno municipal y aseguran que la inacción del gobierno de PP y Vox “pone en riesgo la seguridad" del estadio y "demuestra una preocupante alineación con los intereses de la actual propiedad del club, conocida por su incumplimiento sistemático de los compromisos con la ciudad”.
“Nuestra obligación es defender al Valencia CF como entidad histórica y a sus aficionados, no proteger a especuladores que utilizan el club como herramienta de negocio privado, como está haciendo Catalá”, apuntó Robles.