Íñigo Peña asegura que el piragüismo español hizo historia en Río de Janeiro

El palista guipuzcoano Íñigo Peña, miembro del equipo español que este sábado fue quinto en K4 sobre 1.000 metros, considera que, con dos oros y un bronce y la disputa de seis finales, el piragüismo español hizo historia en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro."Fueron seis barcos en seis finales. Fueron increíbles los resultados del piragüismo español en estos Juegos Olímpicos", afirmó el palista tras disputar la regata con la que concluyeron las pruebas de piragüismo en Río de Janeiro.
España conquistó dos oros y un bronce en piragüismo sprint. Saúl Craviotto y Cristian Toro se proclamaron el jueves campeones olímpicos en K2 500 metros; Marcus Cooper se colgó el martes el oro en K1 1.000 metros, y Craviotto conquistó este sábado el bronce en K2 200 metros.
En las otras tres finales, Sete Benavides llegó cuarto en C1 200 metros, a sólo 21 milésimas del bronce; el cuarteto de K4 1.000 metros fue quinto, y la gallega Teresa Portela, en su quinta participación en unos Juegos Olímpicos, fue sexta en K1 200 metros femenino.
"Fueron tres medallas olímpicas, un cuarto lugar, nuestro quinto puesto y el sexto de Teresa Portela. Todos llegamos a finales. Lo que hemos conseguido es increíble", aseguró.
Peña dijo que un quinto puesto en la prueba reina del piragüismo y un diploma olímpico no pueden ser desmerecidos pese a que el objetivo era alcanzar una medalla.
"Claro que estamos contentos con el diploma olímpico. En un principio, cuando llegamos a meta, no sabíamos si éramos cuartos o quintos porque llegamos junto a Australia. Quedamos quintos, te quedas con un poquito de pena porque al final todos estos cuatro años trabajamos para conseguir una medalla aquí, pero, bueno, mientras van transcurriendo los minutos ya piensas que un quinto puesto y un diploma olímpico tienen mucho mérito", dijo.
"Estamos aquí, conseguimos diploma olímpico y ahora toca disfrutarlo", agregó.
Peña admitió que el equipo español podía haber conseguido un mejor lugar sino se hubiese equivocado de estrategia.
Afirmó que cuando llegaron a la Lagoa Rodrigo de Freitas había mucho viento en contra y decidieron reservar fuerzas en los primeros metros de la prueba para darle con todo en los últimos.
"Lo que pasó es que, cuando transcurrió la mañana, el viento amainó y cuando estábamos en la salida el viento apenas te daba de cara. Hemos mantenido nuestra táctica y los K4 de Alemania y Australia han salido a muerte desde el primer momento y al final por mucho que hemos querido remontar ya no había tiempo. Hemos recortado un poco pero no para la medalla de bronce", afirmó.
El palista admitió que el equipo español tiene un gran futuro por contar con integrantes jóvenes pero que por ahora no están pensando en los Juegos Olímpicos de Tokio 2000.
"Ahora todos lo vemos lejísimos (Tokio). Hemos terminado una etapa que es Río. La verdad es que todos tenemos ganas de tomar unas largas vacaciones porque han sido cuatro años muy intensos. Hemos trabajado muchísimo. Tenemos que verlo año a año. El año que viene hay Mundial. Por ahora no vemos más allá del Mundial del año que viene. Poco a poco tendrá que reconfigurarse el equipo español", dijo.
El oro en K4 1.000 metros se lo colgaron los alemanes con un tiempo de 3:02.143 y le dejaron la plata a los eslovacos (3:05.044) y el bronce a los checos (3:05.176).
Los españoles Javier Hernanz, Rodrigo Germade, Óscar Carrera e Íñigo Peña, que se habían clasificado para la final del K4 1.000 metros con el segundo mejor tiempo de su semifinal, entraron a 4,6 segundos de los alemanes.