De PyeongChang a Tokio, de la nieve al verano
Varios deportistas que participan estos días en las pruebas de esquí nórdico estarán también en los Juegos Paralímpicos de verano de Tokio 2020 en otras disciplinas muy alejadas de los deportes de nieve y hielo.La estadounidense Oksana Masters, triple medallista en PyeongChang en biatlón y esquí de fondo, ya estuvo en los Juegos de verano de Londres 2012 en remo, después en Sochi 2014 en esquí y en Río de Janeiro 2016 en ciclismo en ruta.
"Siento que tengo asuntos pendientes en el ciclismo, así que creo que voy a centrarme en eso, tratando de llevarlo paso a paso. Aún así, seguiré esquiando porque quiero estar en Pekín 2022", dijo Masters.
El croata Antun Bosnjakovic perdió sus piernas en un accidente en 2014. Practicante de ciclismo en ruta y triatlón su idea era debutar en unos Juegos en Tokio, pero descubrió el esquí nórdico y, como se ajustaba a su calendario deportivo, se ha presentado en PyeongChang, dónde ha finalizado vigésimo cuarto en la prueba de 1,5 kilómetros.
En Tokio 2020 quiere competir en triatlón. Para ello entrena con el seleccionador del equipo nacional de triatlón sin discapacidad.
"Me dijo que siempre quiere llevar a sus muchachos a las preparaciones de esquí nórdico. Es la preparación perfecta para el triatlón porque hace que todo tu cuerpo funcione. En mi país los esquiadores también entrenan otras disciplinas durante el año", confiesa Bosnjakovic.
La brasileña Aline Rocha es la única mujer latinoamericana en los Juegos de PyeongChang. Su debut en unos Juegos fue en Río de Janeiro en atletismo en silla de ruedas.
"La diferencia es que usamos más fuerza abdominal en el esquí y en las carreras de sillas de ruedas mantenemos nuestros cuerpos bajos, pero en el movimiento del brazo, básicamente utilizamos los mismos músculos", señala Rocha, que no descarta estar en Tokio otra vez en atletismo.
La alemana Andrea Eskau ha ganado siete de sus doce medallas paralímpicas en la nieve, tres de ellas en PyeongChang, pero ya mira al futuro en Tokio 2020 en ciclismo.
"Entrenar ambos deportes durante todo el año ha sido clave para mantener la fortaleza. En verano, tienes músculos más largos y en invierno tienes más masa. Realmente siempre estoy haciendo las dos cosas. Eso es bueno y me gusta cambiar. Si hago lo mismo todos los días, sería aburrido", concluye Eskau.