Fernando Alonso manda un 'zasca' al recordar su etapa en Alpine: "Noté falta de profesionalidad"

El fichaje de Fernando Alonso por Aston Martin fue una sorpresa cuando se cerró. El piloto español estaba negociando su renovación con Alpine pero la opción de la escudería británica apareció en el mejor momento posible, justo tras el anuncio de la marcha de Sebastian Vettel. Alonso, en El Larguero con Manu Carreño, ha hablado entre otras cosas de su actual relación con Carlos Sainz o de cómo se fraguó su incorporación a Aston Martin para este 2023.

El Gran Premio de Italia dejó unas sensaciones muy agridulces en el box de Aston Martin. Pese a que todo el mundo sabía que el trazado de Monza no era el más adecuado para las prestaciones del monoplaza, Alonso luchó hasta el final para sumar el máximo número de puntos posible, sobre todo para mantener una distancia prudencial con Lewis Hamilton en el Mundial. Una batalla que, en realidad, es inesperada, como su fichaje por Aston Martin. "Fue un cúmulo de circunstancias. La primera, que Vettel se retiró. Sin ese anuncio, que nos pilló por sorpresa, ese asiento no hubiera estado libre", explica el asturiano en El Larguero.

Alonso, además, lanza un contundente mensaje contra Alpine, quienes la pasada temporada demoraron muchísimo la renovación de su piloto estrella. "Otro factor que hizo que cambiase de equipo era que en Alpine llevaba ya unos meses de negociación y nunca llegaba el papel para firmar la renovación pese a estar prácticamente de acuerdo en todo. Noté falta de profesionalidad. En Aston Martin, si Vettel se retiró el jueves, el viernes estaba el papel en mi mesa. Ese deseo por tenerme me atrajo y sedujo. Era una aventura, había riesgo con el cambio, pero la corazonada salió bien. En ese momento Aston Martin demostró un nivel de ambición mucho mayor", profundiza el piloto asturiano.

Fernando Alonso mira de reojo a Marina Bay

Tras un desastroso fin de semana en Monza -Alonso terminó noveno el domingo y estuvo sufriendo durante todos los días de Gran Premio-, Singapur aparece en el calendario como una bendición. Ahí el español ya sabe lo que es ganar (lo hizo tanto en 2008 como en 2010) y subir al podio, por lo que se antoja como una de las pistas más importantes para que la 33 llegue.

"Seguro que va mejor que en Monza, que era un circuito que teníamos en el calendario con la cruz marcada. Singapur no lo tenemos con una cruz positiva, pero sí que hay esperanza de hacerlo bien. Voy con muchas ganas. Me conozco y sé que lo voy a dar todo", destaca el piloto español.