La entrañable celebración de Aprilia tras su doblete en Montmeló: deportividad entre Aleix Espargaró y Viñales
El Gran Premio de Barcelona-Cataluña dejó una de las imágenes más entrañables y emocionantes de toda la temporada en el Mundial de MotoGP. La carrera del domingo la ganó Aleix Espargaró cuajando una excelente carrera; justo por detrás, terminó su compañero de equipo Maverick Viñales. Un resultado histórica para la marca italiana, que sigue con su clara evolución en el Campeonato de Motociclismo. La victoria de Espargaró es la segunda de este curso, tras la conseguida en el pasado Gran Premio de Silverstone; por su parte, Viñales logró por cuarta vez un podio con Aprilia desde que aterrizó a mediados de 2021.
Aleix Espargaró, Viñales y la celebración con Aprilia
Más allá de las buenas sensaciones a nivel de resultados, los dos pilotos catalanes dejaron una imagen icónica y para el recuerdo. Un gesto de deportividad que confirma la buena relación que tienen y el enorme compromiso que existe actualmente en el box. Una vez cayó la bandera de cuadros y se corroboraron los resultados finales, Espargaró y Viñales celebraron la primera y la segunda posición por su cuenta. Pero una vez se encontraron en un punto determinado del circuito haciendo la vuelta de honor, Espargaró le hizo a su compañero una propuesta nunca antes vista.
A bike swap, hugs and tears of joy 🤩
Amazing scenes from Barcelona as @AleixEspargaro and Maverick celebrated Aprilia's first 1-2! 🙌#CatalanGP 🏁 pic.twitter.com/eThXizwsG4
— MotoGP™🏁 (@MotoGP) September 3, 2023
"Me ha salido de dentro intercambiarme la moto con Viñales. Me acordé de Maverick llorando en Austria, cuando le dije que se viniera conmigo a Aprilia. Le he dicho: mira dónde estábamos hace nada, y mira dónde estamos ahora, haciendo un doblete en MotoGP ¡y con Aprilia! Me ha salido de dentro hacerlo por el equipo, es un regalo para ellos", explicaba el piloto catalán tras la carrera ante los micrófonos de DAZN.
La imagen que ambos pilotos dejan tras el Gran Premio es única. Nunca antes se había visto un gesto de deportividad de tal calibre entre dos compañeros de equipo. Sí que es verdad que Espargaró y Viñales son muy amigos, pero igualmente en la competición este tipo de actos son efímeros. La relación que tienen entre ellos y con el propio equipo es el claro ejemplo de que con esa dedicación los resultados llegan por sí solos.
Aprilia, hasta hace no muchas temporadas, era una fábrica más en MotoGP. Una vez llegó Espargaró en 2017, la marca de Noale intentó dar un paso adelante. No fue nada sencillo y hasta 2021 no se empezaron a ver los frutos. En ese mencionado 2017, Espargaró y su entonces compañero Sam Lowes no sumaron un solo punto en la carrera de Montmeló. Seis años después la historia es completamente diferente: Aprilia es una de las mejores motos de la parrilla.
