"No es fácil finalizar el acuerdo. Estamos trabajando en ello". Con estas palabras Gigi Dall'Igna, team manager de Ducati, dejaba entrever que cerrar el fichaje de Marc Márquez para su equipo oficial por dos temporadas ha sido más difícil de lo que parecía. Fichar a un super piloto como el de Cervera conlleva un contrato con muchísimos detalles, más teniendo en cuenta la cantidad de patrocinadores que tiene el catalán.
Marc Márquez llega a un equipo, el Ducati Lenovo, que va bien servido de patrocinadores. La marca italiana es la más dominante en los últimos años y patrocinadores no le faltan ¿El problema? Que muchos de ellos son empresas que son competencia directa de los que llevan apoyando al ex de Honda durante toda su trayectoria deportiva.
Por ello, entre Ducati y el piloto tendrán que llegar a un acuerdo, y no sería de extrañar que Marc tenga que hacer algunos sacrificios si quiere volver a ser campeón del mundo. Parece claro que el mayor de los Márquez está dispuesto a pagar el peaje. Ya lo hizo hace unos meses cuando dejó Honda tras toda una vida juntos y también a Repsol, que había patrocinado al equipo japonés prácticamente desde su llegada. Y, además, desde hace unas semanas es también embajador de Audi, poniendo fin así a su relación con los coches de calle de Honda.
Marc Márquez tiene a su lado a patrocinadores de gran calado, empresas multinacionales que llevan apostando por el piloto durante muchísimos años. Red Bull es una de ellas, y el problema es que Monster, uno de sus grandes rivales en el mercado, es uno de los patrocinadores principales de Ducati. Lo mismo ocurre con la marca de gafas de sol Oakley, patrocinador de Marc y que rivaliza con Carrera, patrocinador de Ducati.
Mismo ejemplo para la aseguradora de Marc, Allianz, competencia directa de la aseguradora italiana UnipolSai o Samsung, el patrocinador tecnológico del piloto catalán y rival de mercado de Lenovo, que incluso da apellido al quipo oficial de Ducati de MotoGP. Y por último, Estrella Galicia, la cervecera española que lleva años acompañando a Marc, aunque Ducati también tiene su propia empresa de vinos, la bodega Contadi Castaldi.
A priori, parece imposible que todos esos patrocinadores puedan compartir equipo y piloto con que tanto Marc como Ducati tendrán que dar su brazo a torcer tras oficializarse su relación para los dos próximos años.