Jorge Lorenzo y su reacción tras probar por primera vez una '500' de las de antes: "Una MotoGP está en otro planeta"
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El mallorquín pudo rodar con una Cagiva C594
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Era una de las espinitas que Lorenzo seguía teniendo
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Jorge Lorenzo ha cumplido uno de sus últimos sueños. Como expiloto del Mundial de MotoGP y con cinto títulos bajo el brazo, el mallorquín está inmerso en un día a día donde combina diversas experiencias en circuitos con la pura tranquilidad. No es la primera vez que se ve a un Lorenzo 'fardar' de su vida. Él mismo lo ha explicado en multitud de ocasiones: con lo que ha sufrido a nivel físico en su carrera deportiva, lo único que quiere es gozar de la vida que tiene. Entre esas experiencias comentadas antes, se encuentran competiciones de coches. Es más, a principios del 2024 firmó por Aston Martin. No obstante, ahora 'es noticia' por haber cumplido uno de los sueños que cualquier piloto más o menos actual siempre ha tenido: probar una 500cc.
Era una de las espinitas que seguía teniendo Lorenzo, hasta hace muy pocos días. Gracias a Giovanni Castiglioni, el mallorquín pudo dar una vueltas en Misano con Cagiva C594. Una moto muy especial en clave Mundial de Motociclismo, ya que tiene la etiqueta de ser la primera en plantar cara a las marcar japonesas de aquel entonces, allá por los años noventa. "Me ha hecho volver un poco a mi infancia, a mi adolescencia, cuando tenía 15 o 16 años y tenía que domar estos motores de dos tiempos. Sinceramente, una MotoGP está en otro planeta, están en Marte, y esto está en el planeta Tierra", declaró a Motosprint.
Jorge Lorenzo cumple uno de sus sueños
Jorge Lorenzo siempre ha estado acostumbrado a las 1000cc de MotoGP, con las que ganó hasta tres coronas en la categoría reina. Cambiar el chip y probar una moto de la generación anterior, hace que el mallorquín se de cuenta de cómo de bien han evolucionado para la comodidad de los pilotos. "Es muy incómoda, porque tienes que doblar muchísimo las rodillas, es realmente incómoda. Es muy difícil meter el pie para poder cambiar de marcha", confiesa en La Gazzetta dello Sport.
"Sinceramente, esperaba una potencia más brutal, seguramente porque no la he subido bien de vueltas. Pero ha sido bonito volver un poco a la infancia. Una MotoGP actual da miedo, si una persona normal prueba una MotoGP, le dará mucho miedo. En esta moto, sin embargo, se tarda una hora hasta llegar a las vueltas correctas", zanja el mallorquín.
Con la de castañas que te pegaste la primera temporada en motogp a pesar de las ayudas electrónicas que tienen estas motos tu, en una 500 llegas a coincidir con Doohan, Crivi, Checa, Rossi, Biaggi, Sete... y no acabas la primera temporada de una pieza.