Los tres estadios con peor asistencia media de la Jornada 1
Horarios intempestivos, partidos que acabaron de madrugada, temperaturas altísimas y un verano que aún colea, además del desencanto de muchos aficionados con las nuevas normativas. La Jornada 1 de LaLiga Santander fue uno de los fines de semana con menos público en los estadios que se recuerda, cayendo en picado la asistencia media a los campos de fútbol.
En ElDesmarque les ofrecemos los tres estadios con menor asistencia media de la jornada.
Camp Nou (52 por ciento de asistencia)
El estreno liguero del FC Barcelona pasará a ser recordado, más allá del resultado, por firmar una de las peores entradas que se recuerdan en el Camp Nou. Un total de 52.356 fueron las personas que ocuparon las gradas del escenario azulgrana, con una capacidad de 99.354 plazas.
Una decadencia que comienza a dejar de sorprender en la Ciudad Condal, que ha visto rebajada en demasía su asistencia desde la incertidumbre que generó la polémica independentista, además de lo que supone un primer partido en agosto.
Balaídos (55 por ciento de asistencia)
Sorprende cuanto menos lo que ocurrió el pasado sábado en Balaídos. Un proyecto renovado, un entrenador nuevo y una plantilla cuanto menos ilusionante no bastaron para enganchar a la afición celtiña, que dejó la segunda peor asistencia media de la jornada.
Con capacidad para 29.000 espectadores, apenas acudieron 16.215 aficionados al estadio, aunque bien es cierto que el calor apretaba en tierras gallegas a las 18.15 horas. Unos datos que empeoran si se comparan con la primera jornada del curso pasado, donde acudieron casi 1.000 hinchas más, aunque supera ligeramente la asistencia media de todo el curso pasado.
Santiago Bernabéu (59 por ciento de asistencia)
La disputa del Real Madrid-Getafe (22.15 horas) no fue la más adecuada para la práctica de un partido de fútbol, que si le acompañas de la incertidumbre que llega con el proyecto menos atractivo de los últimos años, resulta la peor asistencia en casi una década.
De hecho, los 48.466 espectadores -de los 81.044 de aforo que posee el estadio- que se dieron cita en el partido ante el cuadro azulón representan una marca negativa en la última década, ya que hay que remontarse a 2009 para encontrar un partido en el Santiago Bernabéu en el que hubiera peor entrada. Fue el 24 de mayo ante 44.270 epectadores.
Curiosamente, fue el último partido antes de que llegara Cristiano Ronaldo al club, cuya marcha coincide con el segundo peor dato de entrada en los últimos años.
Una asistencia media similar a la de Ipurúa, que registró una de las entradas más pobres desde que ascendió a la élite y que podría estar expuesto, junto a Real Madrid y FC Barcelona, a una multa por parte de LaLiga Santander.