La regeneración del vestuario bético
El secretario técnico del Betis, Alexis Trujillo, ha dejado ya entrever, en sus primeras declaraciones como uno de los responsables de la planificación deportiva del equipo verdiblanco, que algunos jugadores que no han rendido esta temporada quizás puedan hacerlo en una próxima.
Deja entrever el canario que futbolistas que evidentemente no han alcanzado un nivel digno esta temporada, desastrosa en el Betis, son recuperables y válidos para el equipo verdiblanco y su futuro.
Y no es que el discurso de Alexis esté fuera de la lógica, ni mucho menos. Para empezar, la entidad no puede soportar una ola de rescisiones de contratos con sus consiguientas indemnizaciones y liquidaciones de contrato, y esa es una razón poderosa para conceder segundas oportunidades. Pero, aún así, el Betis y Alexis deben medirse bien a la hora de ofrecer reválidas, porque hay muchos jugadores que no se lo merecen.
En realidad, con algunos casos y algunos pilares que sustenten la renovación, como Adán o Jorge Molina, el Betis debe someterse a una regeneración profunda 'aprovechando' su paso por Segunda división. Intentar rascar lo que haya en la cantera, complementar el plantel con lo mejorcito que encuentre de Segunda y buscar apuestas de futuro que puedan dar el nivel en la categoría de plata, que no debe de ser tan exigente, con vistas a un crecimiento futuro.
Pero no debe enquistarse el Betis. El dramático hedor que ha desprendido el plantel esta temporada debe de ser erradicado, y eso se hace olvidando a la mayor parte del equipo. Ante la duda, la respuesta debe ser regeneración, renovación. Y por ahí debería empezar a renovarse el Betis en el vestuario, aunque el postulado, cambiando algunos nombres, sea absolutamente extrapolable a los despachos.
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