Un enorme Tuti Sabonis no logra rescatar a un Clínicas bajo mínimos (65-57)
El Instituto de Fertilidad Clínicas Rincón no pudo volver a la senda de la victoria en su visita al Barris Nord de Lleida, ya que acabó hincando la rodilla ante el equipo local por la misma diferencia que en el partido de ida. El 65-57 marcó la superioridad del Força Lleida, que rompió el partido en el tercer cuarto y obligó a los nuestros a hacer una gesta para volver a meterse en el encuentro tras tener que remontar una diferencia abismal de 20 puntos. Las fuerzas llegaron justas a los últimos minutos y los locales sumaron un nuevo triunfo.
El gran partido de Tautvydas Sabonis -24 puntos- no sirvió para sumar una importante victoria, pero sí para demostrar unas vez más que este equipo es mucho más que Ricardo Guillén y Alfonso Sánchez. Con las bajas de ambos, y también con las de Morayo Soluade, Romaric Belemene y Kenan Karahodzic, el equipo empezó un tanto frío el primer periodo. Un primer parcial de 12-5 en los primeros cinco minutos de partido dejaba claro a los de Tomé que el Força Lleida quería volver a agradar ante su público. Poco a poco los malagueños fueron anotando y no dejando que el rival se escapara en el electrónico.
Con un peligroso 22-11 en los primeros diez minutos arrancó el segundo periodo. Se veían más metido en el partido ofensivamente a Lleida, pero aunque costaba mucho anotar, el Clínicas lo hacía como podía. Un primer acercamiento a seis puntos daba aire a los de Tomé, que confiaban en Sabonis para los trabajos en ataque. Viny Okouo se animó también en varios momentos. El interior, que realizó un buen encuentro secundando al lituano, se mostró firme y seguro en ambos lados de la pista. Con mucho trabajo y sufriendo en defensa el descansó llegó con ventaja de ocho puntos para el equipo local (30-22).
El maldito tercer periodo volvió a castigar demasiado a los jóvenes del Clínicas. En apenas cuatro minutos se vieron arrollados por un Lleida que salió a matar el encuentro. Los primeros tres minutos fueron de tira y afloja entre ambos equipos, con intercambio de canastas que beneficiaban en todo momento a los catalanes, pero después, en la recta final del periodo, apretar el acelerador aprovechando que el físico malagueño estaba al límite. Se escaparon los de Joaquín Prado por 20 puntos (54-34) y todo parecía sentenciado.
Con la abismal diferencia el Clínicas Rincón tuvo que tirar de orgullo. Al contrario que en otros partidos, donde se bajaron los brazos cuando más difícil estaba el encuentro, Tomé alentó a los suyos para que siguieran confiando en volver a meterse en el partido. Así fue, tirando de defensa y de buenas acciones en ataque para ir remontando poco a poco y verse con opciones, remotas eso sí, de llevarse el encuentro. A falta de tres minutos el equipo consiguió ponerse a ocho puntos, pero la gasolina estaba ya marcando la reserva. Aún así, se terminó cayendo por 65-57 y volviendo a demostrar que las bajas en este equipo pueden ser importantes, pero que nadie va a dejar de trabajar y escudarse en las ausencias para seguir creciendo.
