Riera resurge a ‘Papy Claude’
El mejor conductor en la historia del trote español, Joan Antoni Riera, ganador de más de 2.500 carreras a lo largo de su trayectoria deportiva y nombre propio de este deporte a nivel internacional, compareció por primera vez en la temporada de trote enganchado que se está celebrando en el Gran Hipódromo de Andalucía Javier Piñar Hafner, y lo hizo para ayudar decisivamente a Papy Claude a que se reencontrara con la victoria en el Premio SELAE-Lototurf, disputado sobre la distancia de 1.800 metros. El doce años de la cuadra HM, que había sucumbido en las dos últimas jornadas ante Soleil du Merle, el mismo al que había batido en las primeras cinco reuniones, volvió a ofrecer su mejor versión y sumó su sexta victoria del meeting, desdiciendo a quienes pensaban que su racha de triunfos en Dos Hermanas era cosa del pasado.
Justo después de que el autostart lanzara la carrera, Soleil du Merle se puso en cabeza e imprimió un selectivo paso. Riera no dudó en recuperar posiciones y avanzó por el segundo carril hasta que se colocó tras el conductor, al que vigiló de forma estrecha hasta que el grupo desembocó en la recta de meta. Ahí, con todo por resolver, volvió a aparecer el mejor Papy Claude. Sin tener que hacer un esfuerzo desmesurado, superó a su rival, que aguantó lo que pudo por el interior, y se fue a ganar con relativa comodidad. Radjah D’Haufor acabó con mucha fuerza y en el último instante le robó la segunda posición a un Soleil du Merle vencido. La victoria de Papy Claude puso en jaque a Asterix Sund, el otro gran protagonista de esta temporada. En la prueba que cerraba la reunión, el Premio Cruzcampo (2.600 metros), tenía la obligación de ganar para sumar también su sexto triunfo y mantenerse a la altura del ejemplar de Míquel Mestre. El pensionista de Toni Frontera, que también venia de morder el polvo el domingo anterior, no se amedrentó lo más mínimo y se impuso con una superioridad insultante en una carrera en la que no halló rival. Llegado el derecho, se fue a ganar sin contemplaciones, dejando muy atrás a los caballos que lo acompañarían en el trío de llegada, He’s a Gangster y New King Vea, que acabaron segundo y tercero, respectivamente. Más allá de ver qué caballo termina sumando más victorias en la temporada, lo que los aficionados realmente desean es que ambos midan sus fuerzas y calidad en un duelo que, además de inédito, sería apasionante. En cualquier caso, sería injusto centrar la atención en estos dos grandes caballos, ya que la temporada está dejando mucho espectáculo con otros protagonistas que también merecen reconocimiento. Es el caso sin ir más lejos de Un D’en Fliper, el estandarte de Miguel Ángel Benimelis, que, en los 1.800 metros del Premio Coca Cola, sumó su quinto triunfo sevillano, dejando de manifiesto que, en cuanto Papy Claude y Asterix Sund vuelvan a pinchar, él estará ahí para igualarlos en número de victorias. Desde los primeros metros de la prueba, Un D’en Fliper se distanció junto a Uncle Yim del resto de participantes. Estaba claro que el triunfo final correspondería a uno de los dos, aunque en los últimos hectómetros no hubo batalla alguna ya que Uncle Yim evidenció tener fuerzas sólo para seguir la estela de D’en Fliper, pero nunca para superarlo. Tevinne du Solat se colgó el bronce. La jornada se inició con dos carreras que concluyeron con sendos finales apretadísimos y sumamente vibrantes. En la primera prueba de la mañana, el Premio Radio Marca (2.600 metros), Pilar Esterlich se convirtió en la primera mujer en ganar una carrera en la presente temporada. Su conducción sobre Tara du Pasteret, a la postre vencedor, fue brillantísima, ya que en la recta de tribunas no dejó de acosar al conductor, Virot, al que terminaría rebasando sólo unos centímetros antes de cruzar el poste de meta. Vip Tirety cerró el trío. Si emocionante fue el desenlace de esa carrera, no le fue a la zaga lo sucedido en los metros finales del Premio The Jockey (South Horse Racing). Fue una preciosa carrera en la que Bunny, por segundo domingo seguido, cantó victoria. Tiene mucho mérito su actuación, ya que, pese a salir desde la última posición, hizo un esfuerzo importante al principio para colocarse en cabeza, posición que no abandonaría hasta el final pese a que en la recta de meta sufrió el acoso de Brot de Llevant y Alegría, que presentó un ataque final por el exterior realmente fuerte y que tan sólo le valió para ser segunda. Los tres caballos entraron en un margen de medio cuerpo, y probablemente el resultado final hubiera sido otro si la prueba hubiera durado unos metros más.