El Meridiano visita Alcobendas, una pista que se atraganta (17:00)

El Meridiano Antequera pone rumbo a una difícil cancha donde el equipo de Quino Soler y Lorenzo Ruiz desea sacar algo positivo tras los intentos fallidos en temporadas anteriores. Las estadísticas están para romperlas, y precisamente eso es lo que están haciendo los jugadores que visten la elástica verde. La nueva ocasión para aspirar a conseguir una victoria frente al Secin Group BM. Alcobendas en el Pabellón de Los Sueños de la localidad madrileña será este sábado 5 de diciembre a partir de las 17:00 horas.

No es la primera vez que el Meridiano Antequera se cruza con el Alcobendas esta temporada, porque este rival ya visitó el Fernando Argüelles en la primera eliminatoria de Copa del Rey derrotando a los locales, pero bien es cierto que la excelente progresión actual de los pupilos de Quino Soler no es comparable a la de hace dos meses cuando se disputó ese encuentro. En la tabla queda demostrado.  Para encarar este nuevo choque, la plantilla se ha ejercitado durante cuatro días en la semana, de martes a viernes, dedicando dos sesiones a realizar un circuito físico para seguir rindiendo al mismo nivel, intercalando también el juego con balón, y otras dos al entrenamiento táctico y al análisis de los vídeos del rival. La mala noticia es que varios jugadores serán duda hasta la misma hora del partido.  Los problemas físicos causados por los grandes esfuerzos se van acumulando a estas alturas de la temporada, como es el caso de Yoel Moreno, que no ha entrenado durante la semana para aliviar sus molestias en la rótula e intentar llegar en buen estado al partido, también el de Adrián Santamaría, que tiene una sobrecarga en los isquiotibiales, y el de Nacho Soto, que arrastra las molestias de un esguince. Además, se unen los procesos gripales de Cristóbal Ortega y Mijas. A pesar de todo esto, los jugadores mantienen la intención de volver a darlo todo otra jornada más.  El Meridiano Antequera dobla en puntos al Secin Gruop BM. Alcobendas, siendo los antequeranos octavos con 12 y los madrileños undécimos con 6, algo que supone un plus de motivación generado por la confianza de hacer bien las cosas.