Espada destaca mérito del bronce al competir muy mermada por enfermedad
La onubense Rocío Espada destacó como muy meritoria la medalla de bronce que obtuvo en el Campeonato de España de Duatlón Cros que se disputó el pasado domingo en Pulpí (Almería), pese a que defendía el título que obstentaba desde la pasada edición, al participar en la prueba muy mermada por enfermedad.
Espada estuvo enferma con fiebre y con placas en la garganta durante toda la pasada semana y llegó a la línea de salida renqueante y mucho peor a la de meta, según reconoció a Efe.
La duatleta manifestó que vivió una carrera "rara", pero valoró que su cabeza "es lo mejor" que tiene "sin duda" y que así fue capaz de aplicar "táctica" y realizar la mejor prueba posible.
En el primer segmento de carrera decidió no arriesgar y correr "como siempre, con mucha cabeza, regulando”, relató la onubense, quien añadió que se encontró “bien, con muchas piernas y corazón” pero también "algo mareada" y por ello tenía "muchísima falta de concentración" y " estaba como dormida”.
Espada desveló que en la transición para iniciar el tramo de bicicleta se equivocó de pasillo, algo que "nunca" le había pasado, por lo que perdió "varios segundos y un puesto", además de que no podía abrocharse el casco, "cosas extrañas" que nunca le pasan, agregó.
“Seguí positiva, aunque empezaba un tramo de bici feísimo, sin nada, y sinceramente ni por asomo pensaba que adelantara como lo hice sin opciones de que se me metieran a rueda”, resaltó la deportista, quien añadió que después hizo el nuevo sector a pie " por inercia" y que entró "francamente mal en meta", incluso fue atendida por los sanitarios, que querían pincharle "porque la tensión no subía”, subrayó.
