El Ejecutivo vasco no descarta el confinamiento domiciliario si la situación no mejora
La segunda ola del coronavirus ya ha llegado a Euskadi. Ante el aumento del número de contagios entre la población, el Gobierno de Iñigo Urkullu ha tomado una serie de medidas para frenar el avance de la pandemia en la región. A pesar del endurecimiento de las restricciones, no se descarta la posibilidad de regresar al confinamiento domiciliario si la situación empeora.
El Ejecutivo vasco quiere frenar como sea el crecimiento de los contagios en la comunidad, cuyas últimas cifras rondan el millar en las últimas 24 horas.
Por ello, el Gobierno de Urkullu ha decidido cerrar perimetralmente Euskadi y así restringir la movilidad en la comunidad tanto para entrar como para salir, salvo en los casos de causa de fuerza mayor.
No es la única medida que se ha puesto en marcha en las últimas horas, pues se ha establecido el toque de queda entre las 23.00 horas y las 06.00 horas.
A pesar de las duras restricciones que se han impuesto, en el Ejecutivo de Urkullu no descartan el confinamiento domiciliario en el caso de que la situación empeore. Así lo ha reconocido el portavoz del Gobierno vasco, Bingen Zupiria, este martes.
"No se descarta ningún escenario", ha aseverado. "En caso de que continúe la progresión, que es lo más probable en los próximos 15 días, se verá si son suficientes las medidas o hay que adoptar alguna más", ha afirmado el portavoz del Ejecutivo.
Las previsiones a corto plazo del Gobierno vasco no son buenas con respecto a la transmisión del virus, ya que "vienen semanas muy duras" en las que el objetivo es "evitar la expansión de la enfermedad y limitar su contagio".
Pese a ello, la intención es no tener que recurrir al confinamiento domiciliario de hace unos meses y adoptar "todas las medidas extraordinarias que haya que adoptar".