Mejoría, pero sin confianzas: las medidas en Euskadi empiezan a surtir efecto
Las medidas impuestas en Euskadi para frenar los contagios de coronavirus parece que empiezan a surtir efecto. Así lo anuncia en su comparecencia la consejera de Sanidad del gobierno vasco Gotzone Sagardui, que invitó a ser positivos pero a no relajarse lo más mínimo durante las próximas semanas para seguir reduciendo la curva.
El coronavirus, al igual que en toda la geografía española, fue expandiéndose por Euskadi con fuerza durante esta segunda ola. Los contagios superan los mil de forma diaria y la presión hospitalaria iba cada vez a más, por lo que el gobierno autonómico no tuvo más remedio que imponer duras restricciones que perjudicaron seriamente al comercio, la hostelería y la movilidad de las personas.
Medidas complejas pero que, con el paso de los días, parece que van surtiendo efecto. En estos momentos y según anuncio la consejera de Sanidad Gotzone Sagardui, la tasa de positividad se sitúa en el 7%, algo inferior que en días anteriores, aunque los contagios siguen acumulando una cifra elevada.
El gobierno vasco sostiene que los datos son mejores, que se puede ser positivo pero que no hay que confiarse para nada. "Todavía es pronto para hacer previsiones. Las medidas son válidas, están funcionando, pero la incidencia de la pandemia y el número de contagios sigue siendo muy alta y no se puede bajar la guardia. Hay que seguir manteniendo las medidas individuales y colectivas de prevención frente al contagio", prosiguió Sagardui.
"Esto no quiere decir que la mejora vaya a ser la misma en los próximos días o que se pueda especular sobre el futuro más inmediato. La reducción de lugares, horarios y actividad donde se producen estas interacciones está dando sus frutos. Euskadi ha entrado en una fase de descenso del número de contagios".