El primer reto de Pacheta
José Rojo, Pacheta es un entrenador meticuloso. Le gusta tener todo controlado y tener influencia tanto en los partidos como en el día a día. Quiere dejar su peso y poso en los jugadores y, por ello, preparó y diseñó una pretemporada con varios partidos amistosos. Fines de semana con doble partido en un claro gesto de adaptación a lo que se encontraba en el Real Valladolid.
Sabiendo que hacía frente a un vestuario con muchos futbolistas, el entrenador burgalés preparó un verano con mucha carga en entrenamientos y, a su vez, varios encuentros para desfogar al jugador y calibrar el momento individual de cada uno. Con todo, la pretemporada iba a marcar a los líderes y, también, a señalar a los débiles. Los descartes y las apuestas se iban a hacer solas. Se 'iban' porque todo ha cambiado.
El brote de coronavirus generado en el vestuario del Nuevo Estadio José Zorrilla ha cambiado los planes, pero no ha dejado, seguro, sin ideas al cuerpo técnico. Éste no es un staff al que le gusten las excusas y que va a mirar a las sesiones de fuerza no realizadas en pretemporada para justificar un bajón en el rendimiento. Siendo el actual un importante obstáculo, el actual Real Valladolid va a aprovechar la situación para calibrar el verdadero liderazgo, la cintura y la total capacidad de Pacheta.
Cambio de guión
Inicialmente, el Pucela contaba para este verano con siete partidos. Éstos eran el escaparate y la oportunidad de mostrarse de muchos jugadores. Ahora, con lo sucedido en las últimas semanas, los de Pacheta apenas cuentan con tres amistosos, dos más sumados al disputado en Tordesillas.
Ante un rival de LaLiga SmartBank y un equipo de LaLiga Santander, Pacheta deberá preparar al equipo para el inicio de la competición. Será de una forma diferente y será con un peso importante de los entrenamientos. Éste es un Real Valladolid que se debe forjar desde el día a día. Desde el entrenamiento. En el terreno de juego de los Campos Anexos está el futuro del equipo y es ahí donde Pacheta y su cuerpo técnico deben afrontar su primer gran reto en Valladolid.
Es eso, el primero, pero, muy seguramente, no será el último. La temporada 2021/2022 va a estar marcada por la exigencia y la adaptación y la pretemporada es la primera gran muestra de todo aquello a lo que se va a enfrentar el Pucela. El 'directo', como decía Sergio González, es el que manda, pero a él se puede llegar preparado o especulativo y este Real Valladolid afronta todo con la ambición de ser el mejor desde el día a día.