Balájnichev recurrirá al TAS por acusaciones de permitir el dopaje en Rusia
El expresidente de la Federación Rusa de Atletismo (FRA) Valentín Balájnichev aseguró hoy que recurrirá al Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) para defenderse de las acusaciones de que promovió el dopaje entre los atletas rusos."Siempre he sido fiel a mis principios. Por eso, recurriré con toda seguridad al TAS. De lo contrario, nunca se podrá aclarar esta historia", dijo a la agencia TASS.
Balájnichev, que fue acusado de aceptar sobornos para encubrir positivos, destacó que a la corte con sede en Lausanna se dirigirá "tanto en lo que afecta a sus intereses personales, como a los intereses del país".
Hoy, mismo, Balájnichev aseguró ver un claro trasfondo político en las denuncias de la comisión independiente de la Agencia Mundial Antidopaje (AMA) sobre la existencia de un sistema de dopaje promovido por el Estado ruso.
"Todo esto es la misma historia: nos querían castigar con el petróleo, el gas, Ucrania y ahora nos quieren castigar con el deporte", dijo.
Balájnichev, el zar del atletismo ruso durante 24 años, dimitió del cargo en febrero pasado debido a los continuos escándalos de dopaje que sacudieron los cimientos del atletismo ruso, que le valieron las críticas del ministro de Deportes, Vitali Mutkó.
Reconoció que "hubo muchos casos desagradables" sobre el consumo de sustancias prohibidas entre los atletas rusos, pero destacó que "no se puede negar el hecho de que Rusia luchó contra el dopaje".
"Ahora no se puede excluir que se adopten contra nosotros medidas sancionadoras, pero deben ser proporcionales a los problemas. Si se nos aplican a nosotros, también deben aplicarse contra otros países", señaló.
La comisión de la AMA acusa a Rusia de una trama que incluiría el encubrimiento de positivos, la extorsión a los atletas, el pago de sobornos y la destrucción de pruebas sobre el consumo de sustancias prohibidas.
En la trama estaría involucrado también Lamine Diack, expresidente de la IAAF, quien habría aceptado dinero ruso a cambio de ocultar los positivos en vísperas de los Juegos Olímpicos de Londres.