Novak Djokovic explota contra Roland Garros: "Me he jodido la rodilla, ¿es mucho pedir?"
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El serbio explotó contra el colegiado
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Djokovic se resbaló con la tierra batida
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Djokovic recibe un grito desde la grada en pleno punto: Roland Garros toma medidas y prohíbe el alcohol
Novak Djokovic se empieza a hartar de Roland Garros. Si hace unos días recibía gritos desde la grada, ahora, la tierra batida del Court Philippe Chatrier ha terminado con su paciencia. Un tenista que no está atravesando su mejor temporada y que, al igual que Rafa Nadal, se va acercando a su retirada.
El número uno del mundo lleva ya varios días cabreado con el torneo, después de terminar su encuentro el pasado domingo a las 03:07 de la mañana. La euforia hizo que se mordiera la lengua ante Lorenzo Musetti pero su cabreó con Roland Garros era visible ante todos.
Djokovic se harta del Roland Garros
Un cabreo que guardó durante días y que acabó soltando en el partido de octavos de final contra Francisco Cerúndolo, pocas horas después de vencer su partido. Esta vez, no fue el torneo quién se llevó la bronca, sino uno de los supervisores, el australiano Wayne McKewen.
El serbio tuvo que ser atendido de la rodilla con 1-2 en el segundo set, después de vencer en el primero con 6-1. Después de un movimiento antinatural, Djokovic sintió algo y prefirió ser atendido por el equipo médico del torneo. Un resbalón que provocó el enfado de 'Nole' y por el que explotó.
"Me he jodido la rodilla. Me resbalo todo el tiempo. Todo lo que pido es barrer (pasar la estera) la cancha en los fondos. ¿Es mucho pedir? Aparentemente, es mucho pedir. Como jugador no lo puedo entender", dijo alterado. Tras esto, cedió el segundo set ante Cerúndolo y sus gritos inundaron las calles de París, demostrando el cabreo que tenía.
Djokovic mantiene el número uno ante Cerúndolo
La victoria, que le mantiene con opciones de preservar de momento el número 1 del mundo, acechado por el italiano Jannik Sinner, le convierte en el tenista con más victorias en Grand Slam, 370, una más que el suizo Roger Federer, a quien también superó en número de cuartos de final de un grande con 59.
El serbio mantiene viva la carrera por su 25 grande para superar a la australiana Margaret Court en el techo del tenis. Djokovic sobrevivió a un segundo maratón consecutivo, tras el que obligó a afrontar en tercera ronda el italiano Lorenzo Musetti y, de nuevo, renació de sus cenizas para agrandar todavía más su leyenda.
En menos de 48 horas, el serbio ha disputado diez sets de Grand Slam y de mucha intensidad, nueve horas sobre la pista, incluido su duelo más largo en el torneo, que por dos minutos superó al que en 2013 jugó contra Rafa Nadal.
Esta vez, además de al argentino Cerúndolo, tuvo que sobreponerse a unas molestias en la rodilla que le aparecieron a mediados del segundo set y que le tuvieron contra las cuerdas hasta que regresó con fuerza en el final del cuarto. Djokovic se medirá por un puesto en semifinales contra el ganador del duelo entre el danés Holger Rune, séptimo favorito, o el estadounidense Taylor Fritz, 12.