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Carlos Alcaraz, los gritos a sí mismo y el enfado por la toalla: “Cada golpe me equivoco, tío”

Carlos Alcaraz, enfadado durante los descansos en el partido ante Jannik Sinner (Fuente: Eurosport)
Editor y redactor deportivo.

Carlos Alcaraz no ha comenzado bien su duelo ante Jannik Sinner. El tenista murciano se ha visto sobrepasado durante el primer set del partido.

Comenzó perdiendo 4-0, donde el italiano llegó a romper hasta en dos ocasiones el saque del español. Cuando parecía que se acercaba al 4-3, Jannik Sinner demostró por qué será el número 1 a partir del lunes y terminó cerrando la primera manga por 6-2.

El murciano se mostró muy concentrado antes de comenzar las semifinales de Roland Garros. Con un gesto serio y la mirada fija en la pista, saltó a la Philippe Chatrier.

No obstante, perdió el primer juego del partido, en el que además le tocó servir. Tras ello, se vio a un Carlos Alcaraz dubitativo e incluso, por momentos, frustrado y desesperado. 

No tardó mucho en cerrar el primer set Jannik Sinner, quien se mostró muy seguro y confiado con su estilo de juego y en menos de una hora logró llevarse la primera manga de las semifinales de Roland Garros.

El enfado de Carlos Alcaraz en Roland Garros

Carlos Alcaraz no empezó bien el segundo set. Con los dos primeros juegos del set abajo, se vio al murciano realizar muchos aspavientos e incluso gritos hacia sí mismo. "Cada golpe me equivoco, tío", llegó a decirse el murciano. Además, estuvo durante varias interrupciones hablando con Juan Carlos Ferrero, su entrenador, en busca de soluciones.

Álex Corretja, extenista profesional y comentarista del duelo de semifinales de Roland Garros, dio la clave por la que Carlos Alcaraz podría mejorar en el partido. "No tiene claridad de ideas, su cabeza no fluye. No puede jugar enfadado y pegarle con rabia a la bola porque así nunca salen las cosas", explicó.

Carlos Alcaraz, durante el partido contra Tsitsipas en Roland Garros (Cordon Press)

Además, Carlos Alcaraz se mostró visiblemente enfadado también en los momentos de descanso. Durante el primer set, entre juego y juego, el murciano se quejó por no tener las toallas con hielo desde el principio del encuentro.

"Un set después, sí, un set después. Se supone que deben estar desde el principio. Pero se supone que debería estar aquí desde el comienzo del partido. Pedí dos, dos. Pedí el hielo", le comentó el tenista a la juez de silla. Las toallas llegaron cuando la manga iba 5-2 para Jannik Sinner.

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