El Palmar vibra con Carlos Alcaraz: la felicidad del pueblo que le vio nacer con su triunfo en Roland Garros
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El Palmar disfrutó del partido de Carlos Alcaraz desde una pantalla gigante
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El pueblo del tenista estaba eufórico con su victoria
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La reacciones a la conquista de Alcaraz en Roland Garros
Si había gente pendiente del partido de Carlos Alcaraz estaba en El Palmar, el pueblo que vio nacer al tenista y que no ha podido contener la euforia cuando ganaba en Roland Garros.
Alcaraz, quien ya había vencido el Abierto de Estados Unidos en 2022 y Wimbledon en 2023, hizo vibrar y también sufrir a quienes se dieron cita en la avenida Pintor Pedro Cano. Desde ahí siguieron el encuentro a través de esa pantalla montada por el Ayuntamiento de Murcia con el respaldo de la junta municipal de El Palmar.
El Palmar, entregado a Carlos Alcaraz
El Consistorio colocó 800 sillas y repartió 800 abanicos para combatir el calor reinante con temperaturas que superaron con creces los 30 grados a la hora en la que se disputó el choque, desde las tres de la tarde. Además, Estrella de Levante, como patrocinador del evento, aportó 500 sombreros de paja para protegerse igualmente del sol.
Las más de cuatro horas que duró el encuentro, una final intensa y repleta de alternativas, fueron seguidas con mucha expectación y con los aficionados aplaudiendo cada punto conseguido por Alcaraz. Todo ello en un espectáculo que contó con animación.
El delirio llegó con su remontada final y, sobre todo, cuando certificó su victoria en la pista Philippe Chatrier, la central del estadio de París. A más de 1.300 kilómetros de distancia se vivió con un interés inusitado y también con tremenda alegría.
Carlos Alcaraz hizo vibrar a su gente y también registró una victoria para la historia. Es el jugador más joven en ganar títulos del Grand Slam en tres superficies diferentes, en hierba, cemento y ahora tierra, solo se apresuró, solo aceleró para acudir al palco de su equipo, a compartir otro gran éxito en su carrera con su familia y con los que día a día comparten el trabajo y la puesta a punto de un tenista con pinta de hacerse un hueco espacioso en la historia.