El sueño de Carlos Alcaraz de conquistar otro Gram Slam esta temporada ha llegado a su fin. El murciano se estrelló contra Botic Van de Zandschulp, número 74 del mundo, y cayó eliminado en la segunda ronda del Abierto de Estados Unidos. El español perdió en tres sets en un partido que se fue a las dos horas y 19 minutos, y terminó con un resultado inesperado para Alcaraz: 6-1, 7-5, 6-4.
Tras sufrir la derrota más dura de su corta carrera, el deportista atendió a los medios. En una sala de prensa principal a punto de llenar, el murciano hizo autocrítica y fue mucho más exigente consigo mismo que cualquiera de sus críticos, mostrando la nobleza que lo ha caracterizado desde que comenzó a destacar. En otras ocasiones hemos visto al tenista romper la raqueta, fruto de la desesperación, pero nunca antes vivir una situación así.
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— US Open Tennis (@usopen) August 30, 2024
"La verdad es que lo que siento ahora mismo es que en vez de dar pasos hacia adelante he dado pasos hacia atrás en tema de cabeza. Y no entiendo por qué", reflexionó el tenista español en la rueda de prensa.
"Venía de un verano espectacular, de Roland Garros, de Wimbledon, saliendo de ahí diciendo que mentalmente había un paso hacia adelante, que me había dado cuenta de que para ganar grandes cosas había que estar duro de cabeza. Vengo a esta gira y es como que he dado pasos hacia atrás: como que mentalmente no estoy bien, no estoy fuerte, ante los problemas no sé controlarme, no sé cómo gestionarlo. Y eso para mí, la verdad, es un problema", continuó.
El tenista de El Palmar explicó que el exigente calendario le ha podido pasar factura. Una agenda a la que este año se han sumado los JJOO. "Puede ser. Tengo que ver qué ha pasado exactamente o qué me pasa exactamente. Ha sido un verano con muchas emociones, muy exigente. El calendario del tenis es muy apretado. He tenido mis momentos de desconexión, pero pienso que me estoy conociendo todavía y a lo mejor como persona necesito más tiempo", aseguró.
"A lo mejor yo soy un tipo de persona que, al venir el calendario tan apretado, a lo mejor no me viene bien o que mentalmente me exijo más de la cuenta. Tengo que ver qué pasa exactamente, pero la verdad es que no he pensado en toda la exigencia tan seguida y no he pensado en que eso es lo que me podía haber afectado", explicó.
Respecto al encuentro, también se mostró muy crítico con su juego. "Mi nivel se quedó en el mismo punto todo el partido y no fue suficiente. Cometí muchos errores. Cuando quise intentar remontar, era muy tarde. Fue una lucha conmigo mismo. En el tenis juegas contra alguien que quiere lo mismo que tú, ganar el partido, y tienes que estar tan calmado como puedas para pensar mejor en el partido. Hoy estaba jugando contra mi oponente y contra mí en mi cabeza. Eran muchas emociones que no pude controlar. Estaba arriba en algunos puntos, luego perdía otros y me venía abajo. Era una montaña rusa en mi cabeza. No puedo ser así si quiero pensar en cosas grandes. Tengo que mejorar, tengo que aprender de esto", reflexionó.