Las lluvias impiden la mejoría del césped de La Rosaleda
El césped de La Rosaleda es otra de las grandes preocupaciones en el Málaga. El sábado llega a Martiricos el Valencia en un partido de enorme importancia y el estado de la hierba del estadio blanquiazul no es, ni de lejos, el apropiado.
Aún colean los tremendos estragos provocados por el hongo Pythium, cuyos efectos se han visto agravados por las fuertes lluvias caídas en Málaga el pasado fin de semana.
El club ha emitido un comunicado en el que asegura que las últimas precipitaciones "han perjudicado el estado del césped, que se encontraba en proceso de resembrado. Los trabajos realizados durante las pasadas semanas en el terreno de juego, de cara a que el próximo sábado luzca su mejor aspecto en el encuentro ante el Valencia, se han visto retrasados tras las inundaciones, que han desplazado las semillas y arrastrado arena y barro al césped de La Rosaleda", reza el comunicado.
Los jardineros expertos que asesoran a la entidad de Martiricos afirman que la hierba "mejorará en cuanto a tracción de cara al próximo partido, si bien no mostrará su mejor aspecto. Además, las previsiones meteorológicas para esta semana, que pronostican lluvias torrenciales para el miércoles o jueves podrían entorpecer aún más las labores de mejora del verde".
Otro hándicap que se une al cansancio físico y mental y a las lesiones. La propuesta futbolística del Málaga precisa de un césped uniforme y en buen estado para que la pelota circule con rapidez. Otra preocupación para Pellegrini.
