La cicatriz de Dortmund tiene ya seis meses
Hoy se cumplen seis meses de la derrota del Málaga en Dortmund, que impidió al conjunto blanquiazul colarse en las semifinales de la Champions League tras firmar un torneo extraordinario.
Medio año durante el que parece no haber pasado el tiempo, ya que la eliminación en el Signal Iduna Park permanece intacta en la memoria del malaguismo como un mal recuerdo. Sobre todo, por cómo se produjo. Medio año en el que el Málaga es otro muy distinto, en jugadores y técnicos. Medio año durante el cual son pocos los que han podido ver repetidas las imágenes. Porque duele y seguirá doliendo.
La fecha del 9 de abril de 2013 permanecerá grabada a fuego en la historia malaguista. Ese día el Málaga honró como pocos días el escudo, pues mereció pasar ante el que a la postre fue más que digno subcampeón de Europa. Tras un trabajadísimo 0-0 en La Rosaleda, el 'Muro Amarillo' no intimidó a los de Pellegrini, que se adelanteron por medio de un zurdazo de Joaquín, cuya exhibición en Dortmund sigue en la retina del malaguismo. Empató Lewandowski tras una gran jugada colectiva del conjunto alemán. Al descanso pasaba el Málaga.
Se llegó al éxtasis con el gol de Eliseu. El luso empujaba a la red un contragolpe de manual que tejieron Joaquín, Isco y Baptista. Ciertamente lo hacía en fuera de juego, aunque complejo de ver y nada visible comparado al del último gol alemán.
A partir del 90, un desesperado Dortmund se dedicó a tirar centros al área de Willy, impenetrable toda la eliminatoria. Reus puso el 2-2 y Santana dio el golpe definitivo tras una jugada en la que había cuatro jugadores del Dortmund en fuera de juego. Craig Thompson y su negligente arbitraje, pues antes había perdonado dos expulsiones a los germanos y permitido su juego sucio, evitaron la gesta. También hubo falta de picardía en los últimos minutos. El caso es que el malaguismo se hizo una herida en Dortmund que tardará en sanar.