Empate a nada
El Málaga CF llegaba este sábado a El Sardinero con la necesidad de sumar tres puntos ante un rival directo como el Racing, pues ambos estaban empatados en la cola de la clasificación de LaLiga SmartBank, misma obligación que tenían los locales. Pero ni uno ni otro supieron cumplir y el encuentro acabó con un empate a cero que más bien sabe a un empate a nada. Los blanquiazules no gozaron de ocasiones muy claras, acusando una vez más la falta de efectividad. Y tampoco pudo convertir en goles dos disparo a la madera el conjunto cántabro.
Durante diez minutos de partido, parecía que el Málaga podía someterse a un juego de toma y daca. Respondía a la presión y la intensidad del Racing, algo que se le presuponía al equipo de Romo por jugar como local y con las necesidades que lo hacía, y mantenía el ritmo. Pero conforme avanzaron los minutos en el reloj, esta ilusión se fue diluyendo.
El cuadro cántabro estaba continuamente llegando al área de Manolo Reina. Incluso cuando Sekou Gassama tuvo que retirarse lesionado tras un remate a puerta en el que se lastimó la espalda en la caída -un doloroso tirón por la sensación que dio en las imágenes-, el equipo local encontró en la dupla Jorge Pombo y Matheus Aiás todo un filón.
Esto creó muchos problemas para el Málaga, que no era capaz de escapar de la presión local y de estar tranquilo entre los continuos parones de juego. Le costaba al equipo dar tres pases consecutivos sin cometer pérdida. Y se gestaban demasiadas faltas peligrosas al tratar de frenar las embestidas de los atacantes racinguistas. Una de ellas, de Escassi sobre Jorge Pombo, acabó con un trallazo del ariete que, por suerte, se estrelló contra la madera.
Se le hizo larga la primera mitad al equipo de Mel, que iba a necesitar el intermedio para tratar de recomponerse y buscar soluciones que, por el momento, no estaban saliendo a la luz.
El Málaga, más intensidad pero mismo resultado
En vista de que no le estaba funcionando su plan inicial, Pepe Mel decidió dar entrada a Ramón. Y, casualidad o causalidad, llegó una buena combinación del equipo que culminó con un centro de Javi Jiménez para Rubén al que llegó antes Parera, pero que permitió volver a ver al Málaga que prometía mejoras en el anterior partido.
Habían entrado con mejor pie los blanquiazules, pero la más clara del inicio de la segunda mitad fue para Mboula con un disparo que se fue directo a la cruceta. De nuevo, la madera de la portería de Reina iba a salvar al Málaga de ir por debajo en el marcador.
Le seguía costando al equipo de Mel reponerse de las ofensivas del Racing, pero al menos en esta segunda mitad finalizaba jugadas y la pelota se acercaba al área de Perera.
Los minutos finales del partido fueron de auténtica tensión. Una mala salida, muy precipitada por parte de Manolo Reina, provocó una falta que acabó lanzando Jurgen desde la media luna y que se fue fuera por poco. Ya en el descuento, Rubén Castro se quedó a centímetros de anotar con un disparo muy mordido. Y apenas unos segundos después, el remate forzadísimo de N'Diaye se marchó fuera.
La angustia acabó, como viene siendo demasiado habitual en este Málaga, en la nada más absoluta. Empate a cero. Empate a nada.
Seguramente no lo publiquéis porque esto es de ayer y yo hablo de hoy. El rompetechos de Gaspar debería estar viendo el Cartagena Oviedo, y al pedazo de jugador que soltaron, Ivan Calero. Lo he dicho muchas veces ya, y lo seguiré diciendo. Se está saliendo un días más, asistencia de gol, centros venenosos remates desde lejos que son casi gol si no es por las paradas del portero del Oviedo. Este chico de 26 años está que se sale, y de seguir así acabará en la élite, al tiempo. Deberían verlo todos, lo recomiendo, y no lo conozco personalmente ni soy amigo, que conste. Solo pido que lo vean, que lo veáis todos, porque este año es un espectáculo. También recomiendo a los jugadores que vean los partidos del Cartagena, a ver sí se les pega algo. Eso es jugar al fútbol y crear peligro una jugada si y otra también. Secretario técnico...anda ya os acostáis tu y el aprendiz de entrenador que trajiste. Claro que la culpa no es solo tuya. Hubo mucho aficionado rompetechos que te lo pidieron. Tu culpa es haberles hecho caso, lince.
El año pasado harto de niñatos y tuercebotas.Este año se sustituyen los niñatos por estrellitas de andar por casa y queda aún algún que otro tuercebota.El resultado el mismo.Deberíamos dejarnos ya de milongas y zarandajas y pedir jugadores de fútbol de los de verdad.El responsable, el tal Gaspar,que debería irse ya por mediocridad manifiesta.No es problema de entrenador, es de una confección de plantilla de locos.
Pepe Mel, tu has sido delantero o juegas al ataque en la Rosaleda y fuera o vas a ser participe del desastre que se avecina. No puedes jugar con un solo delantero con 41 años por muy goleador que haya sido. Jugando así no cambias tu la dinámica en la que está metido este equipo. Desastre total.
El Málaga sale vivo de El Sardinero, por tanto solo destaco el punto, ni si quiera el dejar la puerta a 0 porque el Racing ha merecido hacer gol sin duda. Estoy harto de la mayoría de jugadores de que hagan la guerra por su cuenta, de que cojan el balón y se pongan a sobarlo en conducciones y caracoleos absurdos donde se han perdido numerosos balones por ello. Es desesperante. Nadie sabe jugar a uno o 2 toques. Lo de no saber centrar o disparar también sigue siendo desesperante. Como llevo diciendo durante años, el problema no son los entrenadores que pasan, si no la panda de tuercebotas que son cuando visten la elástica malaguista, no hay más. Si la temporada pasada fue una tortura y un sin vivir de tanto sufrimiento, esta se va a superar, salvo que por marzo o así el equipo ya sea de 1ªRFEF. Ahora mismo tenemos muchísimas papeletas para ello.
Sr. Mel ha visto usted esta tarde la banda que forma la plantilla del Malaga ? Pues si se ha fijado bien ya sabe lo que le espera.